El seleccionado argentino de fútbol superó con solvencia un duro examen, destacó hoy la prensa albiceleste en referencia al empate (0-0) que obtuvo ante Brasil en Belo Horizonte por las eliminatorias sudamericanas al Mundial de Sudáfrica-2010.
Después del pobre empate 1-1 como local ante Ecuador, el equipo argentino dirigido por Alfio Basile rescató otra igualdad en el gran clásico sudamericano, ahora con una lectura diferente, ya que se destacó el resultado obtenido ante los pentacampeones mundiales, verdugos de los albicelestes en los últimos años.
«El empate fue un negocio para Argentina y una frustración para Brasil», tituló el diario Clarín, que criticó al equipo local, en crisis tras la caída 2-0 del domingo pasado frente a Paraguay, al señalar que se mostró «cerca del miedo» y con «una pobreza de luces llamativa, porque no se sabe qué quiso hacer Brasil».
Respecto de Argentina, el matutino señaló que «es una exageración decir que jugó bien. Cuidadoso, ordenado, sacrificado, solidario, pero sin tomar la decisión de ir a buscar el triunfo cuando Brasil era pura confusión».
Sobre los dos entrenadores, que llegaban condicionados por las recientes flojas actuaciones, Clarín señaló que Dunga sufrió la peor parte, al ser silbado y tildado de «burro» por los fanáticos locales, mientras que a Basile no le fue mucho mejor porque «Argentina no pudo quebrar a uno de los peores equipos de Brasil».
El deportivo Olé celebró la igualdad y tituló «Voce arrugó», y ponderó los aplausos que recibió de parte de la «torcida» (hinchada) local el estelar Lionel Messi al ser reemplazado sobre el final, entendiendo que el reconocimiento, si viene de un rival clásico, tiene un valor extra.
En cuanto al partido, comentó que «el gran clásico defraudó porque ambos pensaron dos veces antes de arriesgar. Brasil fue un equipo sin adrenalina y su juego sin fluidez devino en ataques torpes y discontinuos. Argentina fue superior tácticamente, manejó la pelota con mejor criterio y dio la sensación de que, si quería, lo ganaba».
Para La Nación, Argentina «quedó en paz y asumió el empate con tranquilidad», y «pudo haber tenido un mejor final si hubiese tomado las decisiones correctas en los tramos finales».
En cambio, expresó que Brasil fue «un talento errante que marcha extraviado por el campo de las eliminatorias entre crudas recriminaciones», y eligió, en coincidencia con el resto de la prensa, al mediocampista Fernando Gago (Real Madrid, España) como la figura del choque entre las potencias sudamericanas.