Apuestan por energí­a nuclear


Gran Bretaña autorizó ayer la construcción de nuevas centrales nucleares a pesar de la oposición ecologista, un mercado que despierta el apetito de empresas británicas, alemanas y francesas en un paí­s donde menos un quinto de la electricidad proviene de la energí­a nuclear.


«El gobierno estima que está en el interés general que nuevas centrales nucleares desempeñen un papel en la oferta energética futura del paí­s, junto a otras energí­as con débiles emisiones de dióxido de carbono», declaró ante el Parlamento el secretario de Estado para las empresas, John Hutton.

«Está en el interés general permitir a las empresas de energí­a invertir en nuevas centrales nucleares», añadió.

La energí­a nuclear, que Hutton calificó de energí­a «segura, limpia y abordable», ayudará al Reino Unido a responder al «doble desafí­o» de asegurar su futuro abastecimiento de energí­a y de luchar contra el calentamiento climático, sostuvo.

Actualmente, cerca del 18% de la electricidad consumida en Gran Bretaña es producida por una decena de centrales nucleares que datan de los años 60 y 70 (contra un 78% en Francia).

El gobierno de Gordon Brown necesita preparar desde ahora su reemplazo, ya que los recursos fósiles como el petróleo y el gas, además de su carácter contaminador, son cada vez más caros, y parece ilusorio descansar únicamente en energí­as renovables aún demasiado caras e insuficientemente desarrolladas.

El gobierno, que se comprometió a aumentar fuertemente la participación de energí­as «verdes» como la eólica, no prevé sin embargo fijar objetivos cifrados de reparto de la futura producción energética del paí­s entre la energí­a nuclear y las otras fuentes.

Los productores de energí­a deberán financiar la construcción, la explotación y el desmantelamiento de estas nuevas centrales nucleares, y el primer nuevo reactor serí­a ensamblado «bastante antes» del 2020, precisó Hutton.