Aprueba ley que protege glaciares


El Congreso de Argentina convirtió en ley la madrugada de hoy un proyecto apoyado por entidades ecologistas que protege las fuentes de agua dulce de los glaciares y fija severas restricciones a la minerí­a, sector con fuertes inversiones extranjeras.


La iniciativa, enviada por la Cámara de Diputados, fue sancionada en el Senado por 35 votos a favor y 33 en contra, con una abstención. Sus disposiciones prohí­ben la actividad minera en zonas de glaciares y periglaciares a lo largo de la extensa frontera común de 5.000 Km con Chile.

La limí­trofe cordillera de Los Andes «es la fábrica del agua, donde se originan las grandes cuencas hí­dricas hacia el Atlántico y el Pací­fico. Lo que ocurra arriba, baja y escurre. Si baja contaminada, afectará cultivos, fauna y al ecosistema», señaló a la AFP el dirigente ecologista Javier Rodrí­guez Pardo.

El Gobierno de la presidenta Cristina Kirchner dejó en libertad a sus legisladores para votar la norma, al plantearse una división entre los senadores de las provincias con explotaciones mineras, que respaldaban un proyecto menos limitativo, y los que propulsaban preservar los glaciares.

El proyecto (aprobado) «está signado por la negación de la actividad minera», dijo antes del debate José Luis Gioja, gobernador de San Juan (oeste), donde la firma canadiense Barrick Gold explota el yacimiento de oro y plata de Pascua Lama, un emprendimiento argentino-chileno enclavado a 4.000 metros de altura en Los Andes.

El proyecto alternativo de un grupo de senadores que impulsaban Gioja y otros gobernadores fue rechazado por la misma cantidad de votos, 35 a 33 con una abstención, minutos antes de la sanción, tras ocho horas y media de debate.

Rodrí­guez Pardo, de la ONG Red Nacional de Acción Ecologista, dijo que la minerí­a produce «en forma directa el 11% del calentamiento global».

El experto medioambiental puso como ejemplo a la mina de La Alumbrera (de capital suizo), en la provincia de Catamarca (noroeste), que utiliza el equivalente a «80% de la energí­a que consume la provincia de Tucumán (norte, la sexta del paí­s), con todas sus industrias».

Argentina es el decimocuarto productor mundial de oro y se estima que estará entre los diez primeros en 2011, según la gubernamental secretarí­a de Minerí­a.

La producción aurí­fera en el paí­s sudamericano creció 6.000% entre 2003 y 2008, luego de dar por superada la peor crisis económica de su historia en 2001, cuando colapsó el sistema financiero y el paí­s declaró el mayor «default» de deuda contemporáneo, por casi 100.000 millones de dólares.

Las explotaciones de minerí­a se extienden por once provincias ubicadas en las áreas precordilleranas.

Un proyecto similar al convertido en ley este jueves habí­a sido sancionado por el Congreso en 2008 pero vetado por Kirchner, a quien los medioambientalistas consideraron influida por las provincias con inversiones en minerí­a.

La ley esta vez tuvo luz verde de la Casa Rosada (gobierno), pero el debate dividió aguas tanto en el bloque del oficialismo peronista como en la oposición.

«Quienes defendí­an la actividad minera no querí­an ninguna ley (…) que englobe a los ecosistemas del paí­s», dijo a la AFP Marí­a Eugenia Testa, directora de polí­tica de Greenpeace.

Según la nueva ley, el Instituto Nacional de Nivologí­a y Glaciologí­a establecerá normas para la protección de glaciares y del ambiente periglacial con el fin de preservarlos como reservas estratégicas de recursos hí­dricos para el consumo humano y la agricultura.