Desde siempre, en mi mundo literario, Gabriela Mistral ha sido una de mis poetas favoritas. Primera y única mujer latinoamericana, que ha obtenido el Premio Nobel de Literatura en el año de 1945; su poesía es su propio vivir, la que hace que su canto sea tan bello, que entreteje lo sublime del amor espiritual con la naturaleza de la vida de aquellos que la leen en un ámbito lleno de profundo sentido humano.
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Recientemente la Real Academia Española y la Asociación de Academias de la Lengua Española han sacado una edición conmemorativa titulada Gabriela Mistral en Verso y Prosa, ANTOLOGíA. Es un bello libro que dada la calidad de las Academias está muy bien lograda en pasta dura y con una bella portada. En Guatemala la distribuye Librerías Artemis Edinter.
Esta edición conmemorativa reúne íntegros sus cuatro libros de poesía que publicó en vida, como son: Desolación, Ternura, Tala y Lagar, lo mismo se suman a ello, textos inéditos y poéticos de obras programadas que no llegó a publicar en vida. Una poesía tan bella que debemos de volver a releerla y que mejor que en esta edición conmemorativa que también ha dado a plaza la poesía de Pablo Neruda y es como dicen los miembros de la academia en su presentación: «Que mejor para ello, en el orden de las ediciones conmemorativas, que hacer resonar en homenaje, con un timbre nuevo y amplificado, las voces de los hijos de Chile que el Premio Nobel reconoció como voces de América…»
Participan grandes académicos de reconocimiento internacional con ensayos muy bien apuntalados sobre la vida y la obra de Gabriela Mistral. Ellos son: Gonzalo Rojas con Gabriela, Carlos Germán Belli con Trechos del itinerario mistraliano, Semejanzas de Gabriela en voces de Mistral de Adolfo Catañón, La Veta mística en la lírica de Gabriela Mistral de Bruno Rosario, otros ensayos de Pedro Luis Barcia, Darío Villanueva y Cedomil Goic y muchos otros importantes literatos del habla hispana.
De los libros de Gabriela Mistral, el que más nos impresionó cuando en nuestra juventud le tomamos más amor a la poesía, es Lagar, uno de sus últimos libros. Pero en realidad, toda la poesía de esta premio Nobel, es exquisita y especial, hecha con una pasión en la cual su canto poético tiene encuentro con el misticismo, donde la autora con su labor creadora discierne su mundo al cual ella siempre expresa un gran amor a la humanidad y en ella a Dios.
En Lagar hay un poema tan bello que siempre nos impresionó, dice en uno de sus versos:
La Otra
Una en mi maté
yo no la amaba,
Era la flor llameando
del cactus de montaña;
era aridez y fuego;
nunca se refrescaba
de aliento de su boca
y brasa de su cara.
Aquí la poeta hace alusión a ella misma. La otra, una en mi maté… Ese poema cuando lo leemos en su totalidad, nos abre un mundo, donde la poeta nos pone a reflexionar sobre nuestro círculo donde se dan muchos quehaceres del diario vivir. Es como decíamos, para nosotros Lagar es uno de sus grandes poemarios.
Gabriela Mistral nació en Chile en el año de 1889, su verdadero nombre era Lucila Godoy Alcayagua. Leamos este verso de su poemario Desolación:
Soneto de la muerte
Mis manos campesinas arañaron la peña
Para clavar una cruz donde mi sueño cabe,
Hecho amor a una suicida por cuya mano suave
Sentí rodar la sangre rota que se despeña.
Esta bella antología es recomendable dada la calidad de su presentación, que incluye también glosario y bibliografía y ante todo los temas que tocan los especialistas en la poesía y prosa de Gabriela Mistral.