Atraídos por sus bellas construcciones coloniales y el fervor religioso de sus habitantes, Antigua Guatemala, a unos 45 kilómetros de la capital guatemalteca, espera la visita de alrededor de 300 mil turistas nacionales y extranjeros en Semana Santa.
«Es el gran evento de nuestra ciudad. Es la semana más importante porque la ciudad se vende sola, pero no con ello queremos hacer de menos el turismo constante que recibimos a lo largo del año», dijo a la AFP el vocero de la Municipalidad de Antigua Guatemala Sergio Ortiz.
Esta ciudad, de apenas 78 kilómetros cuadrados, es uno de los principales atractivos culturales y religiosos de Guatemala durante la celebración religiosa de la Cuaresma y la Semana Santa.
Según los registros de la comuna, en 2009 se registraron un total de 287.000 visitantes nacionales y extranjeros para presenciar las procesiones y las coloridas alfombras que marcan el paso de los cortejos, producto del fervor religioso de los antigí¼eños.
Las alfombras, realizadas con todo tipo de materiales, pero sobre todo aserrín de colores y motivos pictóricos, alegóricos o religiosos, están inspiradas en la tradición maya.
Particulares o asociaciones se encargan durante horas de realizarlas en las calles por las que poco después pasarán los pasos religiosos de las procesiones y los miles de fieles que los siguen, convirtiéndolas en pocos minutos en polvo.