Anne Hathaway es una de las actrices más delgadas de la industria de Hollywood pero está algo gorda para el próximo papel que tiene que interpretar. La actriz de El diablo se viste de Prada debe de encarnar el papel de Fantine, una madre soltera y prostituta, en la adaptación cinematográfica de Los Miserables.
Los productores de la película quieren que Hathaway pierda mucho peso. El objetivo es bajar 9 kilos – dos tallas menos de la que tiene- para rodar las escenas de su muerte.
Por exigencias del guion y de los plazos del rodaje Anne Hathaway tiene que adelgazar estos kilos en solo dos semanas. «No es lo ideal, pero, al igual que con cualquier película de alto presupuesto, hay limitaciones estrictas de tiempo». ha declarado un portavoz de la productora. Para lograr bajar de peso a paso veloz solo come dos manzanas al día y un batido de proteínas. «Anne sabe que el riesgo de este tipo de dieta extrema y se someterá a exámenes médicos semanales para asegurarse de que todo sigue funcionando como debería hacerlo», informa desde la productora.
La película también está protagonizada por Hugh Jackman y Russell Crowe. Hathaway y Jackman ya cantaron juntos, en la gala de los Oscar que presentaron juntos en 2009. Él se meterá en la piel de Valjean, el preso fugado que cambiando de identidad llega a ser alcalde e intenta ayudar a Fantine. Russell Crowe hace el papel de villano. Su estreno está previsto para finales de año.