Se sospechaba desde hace tiempo, pero ahora los astrónomos lograron confirmarlo: la enorme galaxia Andrómeda se ha expandido devorando a estrellas de las pequeñas galaxias vecinas. Un equipo internacional de científicos descubrió lo que dice son «restos» de galaxias enanas vecinas destruidas e incorporadas a Andrómeda. El equipo de astrónomos del Sondeo Arqueológicio de Andrómeda -que publican su investigación en la revista Nature- logró obtener imágenes detalladas del evento que ocurrió a unos 2,3 millones de años luz de la Tierra.