Héctor Ixcot López, alcalde de San Mateo, Quetzaltenango, y presidente de la Asociación de Alcaldes de Xelajú, indicó que los jefes ediles no están siendo presionados por nadie para exigir una reforma fiscal.
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Ixcot enfatizó que algunos alcaldes están solicitando imponer el tributo a las empresas de telefonía sin afectar al usuario, debido a que muchas de las torres de transmisión y repetición instaladas en los departamentos no pagan regalías a los municipios.
Además agregó que tampoco se tributa por la gran cantidad de cabinas telefónicas que utilizan los espacios de los municipios sin que las comunas reciban algo a cambio, entonces es una manera justa de ponerlos a tributar sin afectar al usuario.
Roberto Villate Villatoro, jefe del bloque Lider, explicó que los alcaldes tienen la opción de una iniciativa de ley del IVAPAZ para garantizar mejores ingresos, y se puede entrar a discutir para saber si es factible aprobarla.
Pero también está la opción de la reforma fiscal, que también es necesario discutirla, pero según Villate Villatoro no estaría garantizado el destino de los recursos a las municipalidades y solo les tomarían el pelo porque los recursos ya tienen otro destino, si se aprobaran.
Roberto Késtler, de la UNE, rechaza cualquier interpretación que se haga porque asegura que la reforma fiscal está destinada precisamente para favorecer a las municipalidades.
Sin embargo las cuentas de los diputados no dan mucha esperanza que antes de finalizar el año se aprueben esta fuente de recursos por lo escaso del tiempo para aprobar, refrendar y publicar en el Diario de Centro América.