Mandatarios de Centroamérica, Colombia y México analizan este martes en la ciudad de Campeche (este) el Plan Puebla Panamá (PPP), un proyecto de cooperación que pretende lograr un desarrollo equilibrado de la región.
«No alcanzaremos un futuro de prosperidad si persisten las terribles desigualdades entre nosotros, incluso dentro de un mismo territorio. Y lo mismo pensamos de nuestra América Latina», dijo el presidente mexicano Felipe Calderón durante una cena de honor que ofreció la noche del lunes a sus homólogos, previa a la inauguración de la cumbre.
Además de buscar la unidad y el desarrollo de Mesoamérica, el fin último del PPP es construir una América Latina «fuerte, próspera, unida y libre», agregó el presidente mexicano.
Con la cumbre extraordinaria del Plan Puebla Panamá, México pretende asumir el liderazgo regional «que le corresponde», dijo Calderón en el estado de Yucatán (este), poco antes de llegar a Campeche.
«Es tiempo de que México asuma su responsabilidad en el rol que le corresponde de equilibrio, de ponderación y de liderazgo regional», apuntó el político.
El Plan Puebla Panamá es una iniciativa lanzada por México en 2001 con el objeto de lograr un desarrollo equilibrado en Centroamérica y el territorio del sur mexicano a través de proyectos de colaboración.
En la cumbre de Campeche el plan pretende ser renovado, dijo a su vez el canciller de Belice, Eamon Courtenay, cuyo país ocupa la presidencia pro tempore del PPP.
«Lograremos mucho más por nuestros pueblos de Centroamérica, el sur de México y Colombia, que son los principales beneficiarios de esta iniciativa», apuntó Courtenay el lunes, tras una reunión ministerial en la que los cancilleres participantes prepararon la declaración final del encuentro.
El Plan Puebla Panamá incluye entre sus proyectos la construcción de una refinería en Centroamérica con capacidad para producir unos 360.000 barriles diarios de petróleo, tema que está incluido en la agenda de los mandatarios que se encuentran en Campeche.
Costa Rica, Panamá y Guatemala son los países interesados en obtener la sede de la refinería, en tanto que cuatro compañías de India, China, Estados Unidos y Japón se disputan la construcción del complejo petrolero que tendrá una inversión de 8.000 millones de dólares.
Sin embargo, el canciller de Belice comentó que aún no se ha decidido si en la cumbre de Campeche se podrá conocer qué país será la sede de la refinería centroamericana, cuya edificación está prevista para 2008, en tanto que su funcionamiento fue proyectado para el año 2012.
Al margen de la reunión, y con el presidente nicaragí¼ense Daniel Ortega como gran ausente, está la disputa entre Colombia y Nicaragua por la posesión del archipiélago de San Andrés y Providencia, actualmente bajo soberanía colombiana pero que el gobierno de Managua ya ha llevado a las cortes internacionales.
Ortega criticó fuertemente en días pasados la participación de Colombia en la reunión de Campeche, en la que el presidente Uribe formalizará la incorporación de su país al PPP.