Amnistía Internacional urgió hoy al presidente cubano Raúl Castro a garantizar la seguridad de las Damas de Blanco, al día siguiente de que las autoridades cubanas disolvieran por la fuerza una marcha de este colectivo y detuvieran brevemente a varias de sus miembros.
«Las autoridades cubanas deben cesar de reprimir la disensiones legítimas y de acosar a los que sólo están pidiendo justicia y poder ejercer su libertad de expresión», afirmó Kerrie Howard, directora adjunta del Programa Regional de Amnistía Internacional para América.
«En lugar de eso, deben revisar su legislación represiva y liberar a todos los que llevan años detenidos tras ser condenados en juicios sumarios por cargos a menudo infundados», agregó en un comunicado.
Las Damas de Blanco, un grupo formado por esposas y familiares de presos políticos cubanos, organizaron una semana de manifestaciones en La Habana coincidiendo con el séptimo aniversario de la detención de 75 disidentes, hacia el 18 de marzo de 2003, 53 de los cuales están todavía encarcelados.
Uno de ellos, Orlando Zapata, falleció el pasado 23 de febrero tras una larga huelga de hambre para protestar por las malas condiciones carcelarias, suscitando una ola de consternación internacional.
Desde que comenzaron las protestas, las Damas de Blanco «han sido víctimas de amenazas e intimidación por agentes de la seguridad cubana», recuerda la organización de defensa de los derechos humanos establecida en Londres.
El miércoles, en la tercera jornada de marchas, la policía cubana disolvió por la fuerza su protesta y detuvo brevemente a varias de ellas. Algunas dijeron haber sido golpeadas por la policía, precisa Amnistía.