El presidente de la Reserva Federal estadounidense (Fed), Ben Bernanke, hizo hoy un diagnóstico prudente de la economía del país, pero subrayó las amenazas que se ciernen sobre el sector inmobiliario residencial y el mantenimiento de la inflación en un nivel incómodamente elevado.
«Por ahora, la debilidad del mercado inmobiliario residencial y de ciertos sectores de ese ramo no parece haber contaminado de manera importante al resto de la economía», afirmó Bernanke en un discurso en el Congreso.
«La economía como un todo debe seguir creciendo a ritmo moderado en los próximos trimestres», añadió el presidente de la Reserva Federal (Fed).
La bolsa de Nueva York operaba a la baja tras este discurso, con el índice Dow Jones perdiendo más de 106 puntos (0,86%) hacia las nueve de la mañana (hora de Guatemala).
«El discurso es un poco más pesimista que el previsto sobre la inflación» y por ello «una baja de las tasas no parece inminente para los mercados», subrayó Mace Blicksilver, de Marblehead Asset Management.
De esta manera, Bernanke señaló que «el nivel de la inflación de base (sin contar la alimentación y la energía) permanece incómodamente elevada».
Por ello, la inflación sigue siendo «la preocupación predominante» para el banco central. Aunque quepan muy pocas dudas de que la inflación se moderará «progresivamente», se mantiene el peligro de que se acelere debido principalmente a los aumentos de salarios, según dijo.
El presidente de la Fed repitió que las próximas decisiones del banco central sobre las tasas dependerán de las perspectivas para la inflación y el crecimiento.
Para el crecimiento «la incertidumbre (…) aumentó poco estas últimas semanas», sostuvo.
Así, «las perspectivas a corto plazo del sector inmobiliario residencial permanecen inciertas» y «la corrección podría resultar más grave que lo que prevemos hoy, tal vez exacerbada por los problemas que está viviendo el sector de crédito hipotecario de riesgo», añadió.
Estos créditos conciernen a los prestatarios poco solventes que pudieron obtener préstamos importantes principalmente debido a la baja de las tasas y a formas de atribución generosas. Los establecimientos especializados en este sector conocen hoy dificultades graves que hacen temer a los mercados por las repercusiones que tendrían en el resto de la economía.
Bernanke subrayó que el aumento reciente de la falta de pago de los préstamos con tasas ajustables «genera serias dudas sobre la pertinencia de las normas de atribución para estos productos».
También aseguró que «el impacto, sobre el resto de la economía y los mercados, de los problemas del mercado de créditos de riesgo debería ser contenido».
«Continuaremos supervisando la situación de cerca», prometió.
El crecimiento llega a alrededor del 2% en el segundo trimestre de 2006 y «parece seguir en un ritmo similar para este principio de año», agregó el presidente de la Fed.
Entre los riesgos en torno al crecimiento, Bernanke destacó la desaceleración de los gastos de las empresas.
«La amplitud de la desaceleración ha sido un poco superior que lo que se preveía, considerando la evolución normal del ciclo económico», agregó.
Las dificultades en el sector inmobiliario podrían «continuar frenando un poco la producción industrial» durante un tiempo, señaló.