Alemania quiere continuar «reforzando las relaciones germano-polacas» y «buscará pacientemente el diálogo con Polonia», tras las tensiones producidas en la cumbre de la Unión Europea (UE) en Bruselas, afirmó este lunes el jefe de la diplomacia alemana, Frank-Walter Steinmeier.
Tras el compromiso hallado con Varsovia en Bruselas y que prevé una postergación de la entrada en vigor del sistema de voto de doble mayoría en el seno de la UE, Berlín «va reemprender (el trabajo) de reforzamiento de las relaciones germano-polacas», dijo Steinmeier a la televisión pública alemana.
El hecho de que Alemania esté ligada a Polonia por «una historia terrible del siglo XX, representa para nosotros un deber la búsqueda paciente del diálogo con Polonia, precisamente en tiempo en que parecen difíciles», subrayó el ministro socialdemócrata.
Steinmeier reconoció que ante de las maratónicas negociaciones en Bruselas, del 21 al 23 de junio, numerosos responsables de la UE «estaban con los nervios deshechos, incluso en Polonia».
Según el ministro, ningún dirigente político se dejó provocar por los «argumentos irritantes» de Polonia y se pudo hallar una solución con paciencia e ingenio. El jefe de gobierno polaco Jaroslaw Kacziynsk, quien consideraba que el voto de mayoría era demasiado favorable a Alemania, recordó las numerosas víctimas que tuvo Polonia por el nazismo durante la Segunda Guerra Mundial.
Steinmeier estimó que los esfuerzos emprendidos para alcanzar un compromiso con Varsovia y Londres condujeron a un «fortalecimiento de la idea europea en todos los países miembros» de la UE.
Londres y Varsovia habían adoptado una política de bloqueo durante las negociaciones de Bruselas.
Tras dos años de parálisis política, los 27 miembros de la UE alcanzaron un entendimiento el sábado sobre las bases de un acuerdo para el tratado europeo destinado a reemplazar la Constitución.