Al menos unas 58 personas murieron, según un balance provisorio, en los intensos combates que continuaban este martes en la Mezquita Roja de Islamabad entre el ejército paquistaní e islamistas presuntamente vinculados con Al Qaida para liberar a «cientos» de rehenes.
«Es una ofensiva final para limpiar la plaza de sus militantes armados», declaró el portavoz del ejército, el general de división Waheed Arshad.
El asalto fue lanzado alrededor de las 05H00 hora local (00H00 GMT). Después de nueve horas de combates cuyo fin parecía lejano, un balance provisorio señalaba en ese momento la muerte de unos 50 militantes y ocho soldados.
Los enfrentamientos en la Mezquita Roja comenzaron el 3 de julio, y las autoridades se vieron obligadas a sitiar al edificio.
Según un balance oficial, 24 personas murieron desde el comienzo de los combates, sin contar las víctimas ocasionadas por el asalto.
El número de muertos podría aumentar a causa de la intensidad de los combates. Al mediodía, los islamistas comenzaron a disparar contra las fuerzas de seguridad desde los minaretes de la mezquita. «Tres o cuatro terroristas tomaron el control del minarete», agregó el general.
«Hay cadáveres por todas partes», indicó un hombre atrincherado en la mezquita e interrogado por la AFP.
Se escucharon fuertes explosiones e intensos tiroteos mientras nubes de humo negro escapaban hacia el cielo, probablemente provocadas por el incendio de una escuela coránica de niñas adyacente a la mezquita. Numerosas ambulancias iban y venían con las sirenas encendidas.
Los radicales presentan «una enérgica resistencia» con armas automáticas, granadas y lanza-cohetes, reconoció el general Arshad.
Durante una breve pausa se rindieron unas 50 personas.
El portavoz del ejército precisó que las fuerzas habían liberado 75% del edificio. «Las mujeres y los niños están en el sótano, así como (Abdul Rashid) Ghazi», el presunto jefe de los irreductibles, declaró a la televisión pública.
El hermano de Ghazi, el líder de la Mezquita Roja, Abdul Aziz, fue capturado el miércoles cuando trataba de escapar del complejo fortificado vestido con una burka de mujer.
Según las autoridades, unos 100 militantes comandados por personas vinculadas a Al Qaida tomaron el control de la mezquita y retienen entre 300 y 400 estudiantes, entre los cuales hay mujeres y niños, como «escudos humanos». Sin embargo, el jefe de los irreductibles siempre desmintió tener rehenes.
Las fuerzas de seguridad socorrieron a 27 mujeres y tres niños, precisó el general Arshad.
El ejército «no va allá (…) para que no se produzca ningún daño colateral innecesario», afirmó. Las fuerzas de seguridad registraron una a una las 75 piezas que tiene el complejo.
Según el general Arshad, no se registró ninguna explosión suicida dentro del complejo.
Poco antes, el general Arshad había dicho que no tenía ninguna información sobre la suerte de Abdul Rashid Ghazi, el supuesto jefe de los irreductibles.
«Ghazi mismo está sano y salvo y permanece en el interior», dijo la fuente interrogada por la AFP desde el interior de la mezquita. Pero su madre murió, asfixiada por el humo, dijo, con la voz cubierta a veces por las deflagraciones.
«Los estudiantes se encuentran en diversos edificios y están decididos a luchar hasta la muerte. Nosotros somos objeto de tiroteos y de un bombardeo intenso», agregó esta fuente, respondiendo a uno de los numerosos teléfonos celulares de Ghazi.
Por su parte, Ghazi había afirmando que 1.800 personas se encontraban con él y que habían prometido morir como mártires antes que rendirse. Su sangre desencadenará «la revolución islámica», prometió Ghazi.
Hasta ahora, el presidente Pervez Musharraf se había mostrado reticente a lanzar un asalto general contra la mezquita, temiendo un baño de sangre. El lunes se habían realizado discusiones de último momento, pero fracasaron por la noche.
Las tensiones en la Mezquita Roja fundamentalista de Islamabad, en cuyo asalto murieron hoy al menos 58 personas, comenzaron hace seis meses.
Enero : Estudiantes de una escuela coránica adyacente a la mezquita ocupan una biblioteca infantil para protestar contra la demolición de varias mezquitas por el gobierno, que finalmente acepta reconstruir una.
Marzo: Estudiantes de las escuelas coránicas vecinas a la mezquita lanzan una campaña de moralidad que tiene como objetivo las tiendas de música y vídeos.
27 de marzo : Los estudiantes secuestran a tres mujeres acusadas de administrar un burdel, antes de secuestrar a dos policías. Todos los rehenes son liberados después que las mujeres aceptan arrepentirse, según sus secuestradores, y son exhibidas ante la prensa llevando la burqa, vestido en forma de campana que cubre y disimula la totalidad del cuerpo.
6 de abril : La Mezquita roja instala un tribunal encargado de controlar la aplicación de la charia (ley islámica). El responsable de la mezquita, Abdul Aziz, amenaza con «miles» de atentados suicidas si las autoridades tratan de abolir el tribunal.
9 de abril : El tribunal de la charia decreta fatuas (decretos religiosos) contra la ministra paquistaní de Turismo Nilofar Bakhtiar después de una foto en que aparece dándole un beso en la mejilla a un paracaidista después de un salto en doble.
10 de abril : El gobierno anuncia el bloqueo del portal internet de la mezquita y de su estación de radio.
19 de mayo : Estudiantes secuestran a cuatro policías después de la detención de una docena de partidarios de la Mezquita Roja.
23 de junio : Estudiantes secuestran a nueve personas, entre ellas siete chinos, de una clínica de acupuntura a la que acusan de ser un prostíbulo. el conjunto de los rehenes es liberado el mismo día.
3 de julio : Enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad que vigilan la Mezquita roja y estudiantes islamistas.
4 de julio : Las autoridades sitian la mezquita e decretan un toque de queda. 1.200 estudiantes dejan el lugar pero otros cientos se atrincheran. En la noche, el responsable de la mezquita, Abdul Aziz, es detenido cuando trata de escapar disfrazado de mujer y cubierto con una burqa.
8 de julio: Su hermano Abdul Rashid Ghazi, responsable adjunto de la mezquita permanece en ella atrincherado y reitera el juramento de preferir morir como mártir que rendirse. En su testamento leído a la AFP, promete que su sangre y la de sus fieles provocará la «revolución islámica».
10 de julio: Después del fracaso de las últimas negociaciones en la noche, las fuerzas paquistaníes se lanzan al asalto de la mezquita.
Muere jefe rebelde
El clérigo y presunto jefe de los rebeldes de la Mezquita Roja de Islamabad, Abdul Rashid Ghazi, murió en un tiroteo entre algunos extremistas del interior y las fuerzas de seguridad, aseguró hoy a la AFP un portavoz del ministerio del Interior.
Fue visto en el sótano y se le pidió que saliera al exterior. Salió con cuatro o cinco militantes que continuaron disparando a las fuerzas de seguridad, dijo el general de brigada y portavoz Javed Cheema.
Las tropas respondieron y él murió en el fuego cruzado, agregó.