La Semana Mundial del Agua fue inaugurada este lunes en Estocolmo, Suecia con un llamado a los Estados y a la cooperación internacional, para fomentar el ahorro del vital líquido como estrategia para salvar vidas; la población mundial crece rápidamente mientras que las reservas de agua dulce se mantienen en el mismo nivel, situación que representa un reto para la conservación y el acceso equitativo.
Durante el acto de inauguración, Torgny Holmgren, Director Ejecutivo del Instituto Internacional del Agua de Estocolmo, afirmó que hipotecar el futuro al extraer agua del suelo, de la superficie y del cielo a mayor velocidad de la que le toma a la naturaleza reponerla, es insostenible e imprudente; además comprometerá la estabilidad y la seguridad de la civilización.
Para el 2050, la población mundial se habrá incrementado a 9 mil millones de personas, pero la cantidad de agua para el consumo no va a aumentar, por lo que compartir y administrar con éxito las fuentes disponibles será necesario cooperar sin prejuicios y mediante relaciones sólidas, añadió Holmgren.
El experto destacó que para superar con éxito las problemáticas del agua, es fundamental la cooperación entre los sectores público y privado, asimismo las sociedades deben aprender a utilizar menos agua y de manera más eficiente y los Estados deben garantizar que su acceso sea universal.
Las enfermedades causadas por peligros en el agua, la sanidad y la higiene matan a más de 5 mil personas cada día y pese a las escalofriantes cifras, los sistemas de salud raramente ponen la atención que el tema requiere, dijo Jan Eliasson, Vicesecretario de las Naciones Unidas, quien hizo un llamado a los gobiernos y a los empresarios para que contribuyan a cambiar esa situación.
La Semana Mundial del Agua, contempla la realización de unos 100 eventos, entre seminarios, talleres, exposiciones y debates, en los que participarán aproximadamente 2 mil 500 expertos, funcionarios, funcionarias, representantes de organizaciones sociales y periodistas.
El evento, con el lema «Cooperación por el agua – Construcción de vínculos», tiene como principal objetivo concretar ideas innovadoras para avanzar hacia un futuro en el uso más inteligente del agua, en donde sea administrada de manera equitativa y sostenible.
En Guatemala, unas 500 mil familias no tienen acceso al agua ni a una fuente de saneamiento; la mayor carga la reciben las mujeres, pues son ellas quienes tienen que resolver los problemas para cocinar, para alimentar a sus hijos e hijas y para la higiene, según la experta en temas de recursos hídricos, Elisa Colom.
En la actualidad, sólo 2 de las 334 municipalidades cumplen con los estándares internacionales de potabilización del agua, apta para el consumo humano; además, el 95 por ciento de las fuentes hídricas, en el país, están contaminadas, concluyó la experta.