Agricultores en paro desde hace más de una semana mantenían ayer bloqueos viales en Colombia, al tiempo que se reportaron brotes de violencia mientras algunos de sus líderes se reunían con las autoridades.
Los incidentes impulsaron a Ecuador a advertir a sus ciudadanos no viajar por tierra a territorio colombiano debido a la situación creada por el paro agrario, que ha impedido el libre tráfico entre ambas naciones con bloqueos intermitentes en pasos de la frontera, la cual tiene unos 580 kilómetros de longitud.
En un comunicado, la cancillería ecuatoriana señaló que «frente a la difícil situación que enfrenta Colombia a causa del paro nacional, el ministerio de Relaciones Exteriores y Movilidad Humana recomienda a los ciudadanos ecuatorianos que tengan planificado viajar vía terrestre al vecino país evitar hacerlo hasta que la situación se normalice».
Aseveró que el gobierno está coordinando acciones con Colombia para ayudar a regresar a los ecuatorianos que quedaron varados en ese país, pero no precisó la cantidad.
Por la noche, luego de disturbios de unos 500 manifestantes encapuchados que apedrearon los vidrios de la alcaldía de Facatativá, en el departamento de Cundinamarca —a unos 35 kilómetros al noroeste de Bogotá_, las autoridades de ese municipio extendieron un toque de queda a partir de las 19 horas hasta las 4 de la madrugada, indicó vía telefónica Jorge Camacho, vocero de prensa de la alcaldía. El toque de queda ya regía desde el domingo por desórdenes similares, agregó.
Cerca de las 19 horas, las delegaciones del gobierno y de los campesinos comenzaron su primera reunión.
En un comunicado, la arquidiócesis de Tunja, garante en la mesa entre gobierno y manifestantes, dijo que los líderes campesinos seguían trabajando en las propuestas que presentarían a los delegados oficiales.
Horas antes, el Defensor del Pueblo colombiano, Jorge Armando Otálora, otro de los garantes, dijo por teléfono que la reunión prevista para iniciarse a la 1 de la tarde no comenzaba debido a que las partes estaban primero reunidas por separado.
La cita se llevó a cabo en la ciudad de Tunja, capital del departamento de Boyacá —unos 130 kilómetros al noreste de la capital colombiana_, con la asistencia de ministros como el de Agricultura, Francisco Estupiñán, y representantes de los cultivadores de papa, cebolla y productores de leche, entre otros, de Boyacá y su vecina Cundinamarca, más Nariño, al sur, que son los tres departamentos donde se han llevado a cabo mayores protestas desde que comenzó el paro el 19 de agosto.
La reunión en Tunja se logró después que el presidente Juan Manuel Santos viajara el día anterior a esa localidad y buscara directamente a los líderes de la protesta.