Las autoridades de Kenia acusaron formalmente hoy al primer secretario de la embajada de Venezuela por el asesinato de la embajadora interina del país latinoamericano en la nación africana. La Policía cree fue el homicidio fue motivado por una lucha por el liderazgo de la embajada.
En un tribunal, Dwight Sagaray fue acusado de asesinar a la embajadora de Venezuela, Olga Fonseca. Sagaray se declaró inocente.
El fiscal Tabitha Ouya también acusó a Mohamed Ahmed Mohamed Hassan, un amigo de Sagaray y quien está prófugo, de conspirar para asesinar a Fonseca.
Ouya dijo que durante la noche del 26 al 27 de julio los dos sospechosos estrangularon a Fonseca. El fiscal dijo que otras personas también estuvieron involucradas en el homicidio, pero no las identificó.
La jueza Florence Muchemi emitió una orden de arresto contra Hassan y puso a Sagaray bajo custodia hasta que se procese su solicitud de libertad bajo fianza. Las autoridades venezolanas acordaron previamente retirarle la inmunidad diplomática Sagaray de modo que pudiera ser acusado.
Fonseca fue encontrada estrangulada en la residencia oficial de la embajada. Ella se había reportado ante el gobierno de Kenia el 15 de julio en reemplazo del exembajador Gerardo Carrillo Silva, quien dejó el puesto después de encarar cargos de acoso sexual por parte de los trabajadores varones de la residencia diplomática en Kenia.
La Policía dijo creer que el motivo detrás del asesinato de Fonseca fue una lucha por el liderazgo de la embajada después de la salida del embajador.
Un jefe policial, quien pidió no ser identificado porque se trata de una investigación en curso, dijo que pese a estar en el país durante unos días, Fonseca desarrolló una relación conflictiva con los empleados de la sede.
El abogado Ngure Mbugua dijo a fines del mes pasado que los empleados de la embajada que se quejaron del acoso sexual le dijeron que después de su llegada, Fonseca les exigió que retiren las denuncias contra su predecesor.
Mbugua dijo que tomó en el caso de los empleados después que la Policía no actuó para investigar las quejas. Dijo que presionó a la cancillería de Kenia para que le pidiera al gobierno venezolano el retiro de la inmunidad del diplomático, para que pudiera ser arrestado y acusado en Kenia o en Venezuela.
El abogado dijo que Carrillo Silva huyó antes de que el proceso se completara.
Carrillo Silva negó, en una entrevista publicada ayer en el diario venezolano Últimas Noticias, que haya huido de Kenia y rechazó las acusaciones de supuestos ataques sexuales a empleados de la embajada venezolana en Nairobi.
El diplomático informó que el pasado 19 de mayo partió de Kenia, donde permaneció por siete años, rumbo a Caracas luego que la dirección de Recursos Humanos de la cancillería de Venezuela le envió un correo electrónico indicándole que debía retornar al país.
En la entrevista, Carrillo Silva relató que tras la llegada de Sagaray a la embajada en julio de 2010 la situación en la sede diplomática comenzó a tornarse muy tensa porque «se negaba a reconocer mi autoridad».