Sólo el tiempo dirá si el acuerdo de divorcio al que llegaron rápidamente Katie Holmes y Tom Cruise será más duradero que su matrimonio de cinco años.
Debe serlo, pues del acuerdo depende cómo los actores crían a su hija de seis años, Suri, en los años venideros. Pero disputas más grandes podrían mandar a la pareja de regreso a las oficinas de sus abogados y obligarlos a entrar en un lugar que han evadido hasta ahora: la corte.
El sorpresivo anuncio del lunes de que Holmes y Cruise resolvieron su divorcio en menos de dos semanas puso fin a lo que muchos pensaban iba a ser un contencioso proceso de separación que se extendería de costa a costa.
Los detalles del acuerdo permanecen sellados y la pareja dijo en un comunicado conjunto que su intención era mantenerlo de ese modo.
«Deseamos mantener en privado los asuntos que conciernen a nuestra familia y expresamos nuestro mutuo respeto por nuestras respectivas creencias y nuestro mutuo apoyo en nuestros papeles como padres», dijeron en su misiva.
De haber tomado más tiempo la resolución de su divorcio, muchos anticipaban a Cruise tratando de trasladar el caso de Nueva York a California, donde puso fin a sus matrimonios con las actrices Mimi Rogers y Nicole Kidman. Ninguno de esos casos duró mucho: Cruise formalizó su divorcio de Rogers en 45 días y el de Kidman en menos de seis meses.
Si Holmes y Cruise tienen una disputa importante en relación con el cuidado o la custodia de Suri, tendrá que resolverla un juez de asuntos familiares. Su acuerdo de divorcio podría establecer que la disputa se ventile en Los Angeles o que permanezca en Nueva York, dijo Steve Mindel, un abogado de divorcios y socio de la firma de Los Ángeles Feinberg, Mindel, Brandt y Klein, que ha trabajado en casos de divorcio en ambas costas de Estados Unidos.
«Sin duda el acuerdo toma en consideración dónde se resolverán las disputas», dijo Michael Kelly, un abogado de divorcios con sede en Santa Mónica, California, que ha manejado numerosos casos de divorcios y custodia de alto perfil.
Dijo, empero, que los acuerdos suelen llamar a las partes a acudir a un mediador o a un juez privado.
Los actores emplearon abogados en ambas costas: Cruise en California y Holmes en Nueva York y Nueva Jersey.
Los tribunales en ambos estados pueden manejar disputas de custodia de menores a través de procesos sellados, y los detallados arreglos entre celebridades rara vez salen a la luz pública en Los Angeles.
Ninguno de los divorcios de Cruise ha sido un espectáculo público y otras estrellas han logrado mantener sus disputas de custodia en gran medida fuera de una corte abierta.
Por ahora el foco de ambos parece ser sacar su separación de las primeras planas. El abogado de Holmes, Jonathan Wolfe, sembró dudas el lunes por la noche en las historias que especulaban sobre cómo llegó la pareja a tan rápida resolución.
«Hay un número de inexactitudes en los reportes relacionados con los aparentes contenidos del acuerdo alcanzado entre las partes», escribió Wolfe, agregando que «sus términos no serán revelados».
Kelly dijo que estará claro cómo el acuerdo de la custodia es estructurado en base a dónde es Suri vista, el público probablemente nunca conozca sus puntos específicos ni cómo se llegó a ellos.
«Cualquier cosa que escuchen a partir de hoy será completa especulación», aseguró Kelly.