Discrepancias comerciales y la imposición de la agencia estadounidense para el desarrollo en Bolivia es lo que está impidiendo que Estados Unidos y el país sudamericano restablezcan lazos diplomáticos, dijo el martes el presidente boliviano Evo Morales.
Indicó que Estados Unidos persiste en su política de imposición y carece del espíritu de colaboración necesario para lograr un acuerdo marco que facilite la superación del roce diplomático.
«Esa cooperación, a través de USAID (Agencia de los estados Unidos para el Desarrollo Internacional), se maneja con fines netamente políticos», dijo Morales durante una entrevista a la AP. «Bajo el pretexto de la cooperación, vienen a imponernos hasta quien va a trabajar para manejar la plata. Ese es el tema central, ese es el debate».
Morales se encuentra en Nueva York para celebrar el primer aniversario del reconocimiento de Naciones Unidas al acceso al agua como derecho humano.
Señaló que el retraso de la firma del acuerdo con Estados Unidos se debe a «tres o cuatro términos» que ambas partes han de aclarar. El mandatario no dijo cuáles son esas palabras, pero señaló que son «clave, de mucha importancia para dignificar a Bolivia».
A pesar de criticar a Estados Unidos, el gobernante boliviano admitió el miércoles que tiene la esperanza de llegar a un acuerdo pronto y que espera que ambos países puedan restablecer la presencia de embajadores.
Morales expulsó en 2008 al embajador estadounidense en La Paz, Philip Goldberg, y a la agencia antidrogas de ese país, DEA, por supuesto espionaje. Ha insistido varias veces en que Estados Unidos utiliza programas de USAID para provocar problemas con el gobierno.
«Cuando le expulsamos (a Goldberg) la conspiración bajó, se desorganizó. Aprendimos de la experiencia», dijo el mandatario. «Ya nos liberamos de ese tutelaje, de esa subordinación».
Insistió en que Bolivia tiene muchos deseos de mejorar sus relaciones con Estados Unidos, pero no está dispuesto a aceptar «relaciones conspirativas».
«Es un país grande que quiere imponer pequeñas cosas a un país pequeño. ¿Y dónde está lo que dijo Obama en la última cumbre de jefes de estado de América? Una relación de respeto mutuo. Eso queremos», señaló.
William Ostick, portavoz del Departamento de Estado estadounidense, dijo el miércoles que no comentaría sobre temas específicos de las negociaciones con Bolivia porque las conversaciones continúan.
«Tenemos esperanzas de que llegaremos a un acuerdo», dijo Ostick. «Estamos buscando un marco con el que definir los aspectos de nuestra relación bilateral».
El mandatario acusó a Estados Unidos el miércoles de «intimidación política» por intentar controlar los fondos que ayudarían y centrarían la cooperación entre ambos países.
«Es una falta de respeto», dijo Morales durante una posterior rueda de prensa en la sede de Naciones Unidas.
El líder boliviano también habló sobre el supuesto descubrimiento de cocaína en su avión cuando el aparato se encontraba en Estados Unidos este año. Dijo que no duda de que quizás el gobierno estadounidense trata de desprestigiarle al intentar relacionarlo con el narcotráfico.
«Esperemos que no pase nada con el avión», señaló. «Tengo mucho miedo al gobierno de Estados Unidos porque conozco sus operadores políticos».
Ostick respondió que no comentaría sobre ese tema porque es una «acusación sin fundamento».
El líder boliviano dijo el miércoles que sigue comprometido con combatir el narcotráfico y que espera la ayuda de Estados Unidos en ese tema. Morales señaló que el país necesita radares en fronteras y tecnología más moderna.
La producción de hojas de coca, materia prima de la cocaína, está concentrada en Bolivia, Colombia y Perú, según reportó recientemente el Informe Mundial de Drogas, de la Oficina de la ONU sobre Drogas y Crimen (UNODC) . Entre los tres países se produjo 149.100 hectáreas de coca en 2010, por debajo de los 221.300 de 2000.