Agresiones fí­sicas de la delincuencia, que se transforman en muerte contra los conductores de autobuses de pasajeros, no cesan de causar contratiempos al usuario urbano o extraurbano.

Este fin de semana largo, dos pilotos más fueron asesinados. Está latente la incógnita si los paros se puedan extender por varios dí­as ante el terror que prevalece entre ese gremio; aunque una parte de ellos esté protegido por elementos de seguridad pública, ha sido evidente que pueden ser agredidos.

Hace diez dí­as fue asesinado un piloto de la empresa Velotax, ruta colonia Maya, zona 18, al norte de la capital, por lo que los conductores extendieron esa paralización del servicio durante seis dí­as, con consecuencias económicas de impacto para miles de pobladores, que pagaron Q5 y hasta Q10 por servicio alternativo parcial.

El pasado viernes, Mario Guerra, de la Asociación de Usuarios del Transporte Urbano y Extraurbano (AUTUE), denunció públicamente que están amenazados de muerte. Ellos han propuesto mejoras y modernización del servicio urbano y extraurbano de pasajeros.

Usuarios de varias colonias en los cuatro puntos de la ciudad y sus municipios han llevado a cuestas, seis meses de paros e incrementos en el precio, pero lo que más preocupa a la familia es el riesgo que corren sus integrantes al transportarse en las lí­neas de servicio público de pasajeros, por la delincuencia y por el mal servicio y atención.

Esta semana es incierta sobre la polí­tica de seguridad al usuario, principalmente por la ausencia del ministro de Gobernación, ante la muerte de su titular Vinicio Gómez. No se sabe con exactitud si la ciudadaní­a quedará desamparada mientras se nombra un nuevo rector de la seguridad en el paí­s o si las autoridades seguirán guiadas por el norte del ministro anterior.