El acelerador de partículas más grande y poderoso del mundo iniciará en marzo un periodo de hibernación de dos años a fin de prepararse para alcanzar sus máximos niveles de energía, capaces de generar otros descubrimientos sorprendentes tras haber ubicado la llamada «partícula de Dios».
El reinicio del colisionador de protones a principios de 2015 preparará el terreno para la observación de más eventos inusuales y revelar más misterios de la ciencia, dijo James Gillies, vocero del laboratorio europeo de física de partículas conocido como CERN.
El Gran Colisionador de Hadrones, ubicado en la frontera entre Suiza y Francia, operará otros dos meses para luego ser apagado hasta el 2014, lo que permitirá a los ingenieros reforzarlo con miles de cables superconductores hasta su «energía de diseño total», dijo Gillies el viernes a The Associated Press.
Los físicos del CERN, por las siglas en francés de Organización Europea para la Investigación Nuclear, no estarán precisamente inactivos mientras el colisionador se toma un descanso. Todavía hay muchos más datos por depurar desde el descubrimiento en julio de una nueva partícula subatómica llamada bosón de Higgs, apodada «partícula de Dios», que promete nuevas claves para comprender el universo.
Durante los próximos dos meses, el Gran Colisionador de Hadrones estará colisionando protones con iones de plomo, y luego los someterá a varias semanas de pruebas antes de que lo apaguen. El colisionador se puso en marcha en septiembre de 2008, pero lo tuvieron que apagar sólo nueve días después, cuando un empalme eléctrico mal soldado se sobrecalentó, lo que causó grandes daños a los enormes imanes y otras partes del colisionador ubicado unos 100 metros (300 pies) bajo tierra.
Costó 40 millones de dólares reparar y mejorar la máquina. Desde su reinicio en noviembre de 2009, el colisionador se ha desempeñado casi a la perfección y la energía producida se ha incrementado a niveles sin precedentes, creando un tesoro de nuevos datos por examinar.
Pero a causa del accidente de 2008, el colisionador sólo podía funcionar a un nivel de energía muy por debajo del que se diseñó para alcanzar. Para solucionar esto, dijo Gillies, en los próximos dos años los ingenieros instalarán 10.000 cables superconductores rediseñados que se conectan entre los imanes. Esto mejorará en gran medida su capacidad para simular los momentos después de la Explosión Primordial (Big Bang) hace 14.000 millones de años.
«Producirá más colisiones. Lo que significa que entre más colisiones haya, más probabilidades hay de ver eventos inusuales», dijo. «La partícula de Higgs fue sólo una de muchas en la lista de deseos de lo que nos gustaría encontrar, así que una energía más alta aumenta el potencial de descubrimientos».