Abren consultas para gobierno


El lí­der del partido israelí­ Likud, el premier Benjamin Netanyahu, en una conferencia con lí­deres judí­os de EE.UU.  FOTO LA HORA: AFP MENAHEM KAHANA

El presidente israelí­, Shimon Peres, iniciará hoy sus consultas para decidir quién será el encargado de formar el próximo gobierno, si Tzipi Livni, lí­der de Kadima (centro) o Benjamin Netanyahu, referente del Likud (derecha).


El presidente israelí­, cuyo poder es en general simbólico, es el encargado de designar a quien estime mejor ubicado para formar un gobierno.

Esa prerrogativa cobra relevancia debido a que los resultados de las elecciones legislativas del 10 de febrero último fueron muy ajustados.

El Kadima obtuvo 28 diputados en el parlamento unicameral (Knesset) y el Likud 27.

«Soy consciente de las grandes dificultades existentes. Haré todo para permitir la formación de un gobierno que refleje lo mejor posible la voluntad de los electores y sirva al paí­s con estabilidad y de manera responsable», afirmó Peres a la radio pública.

Peres tiene previsto empezar a recibir a partir de las diez de la mañana (hora de Guatemala) a los representantes de Kadima y luego del Likud, antes de recibir a a los jefes de los otros partidos, entre mañana y el viernes, entre éstos el jefe de Israel Beitenu, formación de extrema derecha, Avigdor Lieberman.

Según la legislación vigente, el presidente tiene una semana para consultar a los candidatos cabeza de lista para designar al que está mejor ubicado para contar con una mayorí­a parlamentaria.

La ley no le impone designar automáticamente al jefe del partido que haya obtenido más escaños.

«Haré todo para respetar los plazos previstos por la ley», aseguró Peres.

Su portavoz, Ayelet Frish, dijo que Peres dará a conocer su decisión «el viernes o el domingo», y precisó que en «estos dí­as» habí­a sufrido «intentos de presión».

«Pero cada vez que alguien lo intentó por teléfono, el presidente les colgaba inmediatamente», afirmó la misma fuente sin brindar otros detalles.

Con 15 de los 120 diputados de la Knesset, Lieberman se ha convertido en el árbitro de los comicios.

Cortejado por ambos partidos tras las elecciones, Lieberman mantuvo el suspense yéndose de vacaciones al extranjero sin revelar oficialmente sus preferencias.

Según la prensa israelí­, aunque es más cercano a Netanyahu, Lieberman podrí­a negarse a elegir y abogar por una «alternancia» (a medio mandato) en el poder, entre Livni y el jefe del Likud, como ya ocurrió en Israel entre 1984 y 1988.

Así­, Livni y Netanyahu serí­an los dos primeros ministros por turnos.

Netanuyahu rechazó la «alternancia» y Livni se declaró a favor.

En teorí­a, Netanyahu está mejor ubicado pues tiene el apoyo de 45 diputados, es decir los del Likud más los siete de dos formaciones religiosas ultranacionalistas y los 11 del partido ultraortodoxo Shass.

Los ultraortodoxos asquenazí­es de la Lista Unificada de la Tora (cinco escaños) también podrí­an apoyarlo.

Livni sólo tiene el apoyo de Kadima.

Los 11 diputados de los partidos árabes se niegan a respaldarla y la acusan de buscar «complacer» a Lieberman.

El Partido Laborista del actual ministro de Defensa, Ehud Barak, que sufrió su peor derrota y sólo obtuvo 13 escaños, no dio a conocer su posición. El Meretz, otro partido de izquierda con tres diputados, se niega a entrar en una coalición en la que esté Israel Beitenu.

El cantidato que sea designado por Peres tendrá 28 dí­as para presentar su gobierno al Parlamento, que podrá prolongar ese plazo en 14 dí­as.