Una difí­cil decisión de todo gobierno es cómo llevar sus relaciones con los medios de prensa, cómo lograr que la información sea objetiva y veraz, cómo obtener que la cobertura de la gestión pública permita que la población a la que informan los medios reciba de forma ponderada y ecuánime la información de su gestión sin recurrir a la presión o a la paga por pauta.

Ningún presidente, vicepresidente, ministro, diputado o alcalde en su gestión produce solo aciertos; sin embargo, dependiendo de la objetividad y ecuanimidad de cada medio, las noticias y los hechos acontecidos pueden ser trasladados de forma imparcial, que no induzcan de manera negativa a quien se informa, sino se le proporcione los hechos objetivamente para que el lector se forme su propia opinión.

Durante el gobierno anterior, donde la pauta innecesaria no se otorgó, son muchos los ejemplos de manipulación y ataque que se pueden citar. la noticia más distorsionada y sesgada fue la denominada «Conexión Panamá», que todaví­a al dí­a de hoy no ha concluido de manipularse. La distorsión fue tal que el Congreso nombró y enví­o una comisión a Panamá, la cual no detectó delitos ni la existencia de cantidades millonarias que se dijo habí­an trasladado el Presidente, el Vicepresidente y otras personas, también produjo el enví­o de una Comisión de la Contralorí­a General de Cuentas que tampoco obtuvo ningún resultado incriminatorio; así­ mismo, el Ministerio Público nombró un grupo de investigación que a pesar de todo el tiempo transcurrido no ha aportado o demostrado hecho delictivo alguno. Es más, en este tema, la juez pesquisidora, Yolanda Pérez, al realizar la investigación previa para levantar el antejuicio en contra de una de las personas sindicadas por la prensa, dictaminó que no existí­a delito alguno que perseguir.

En contraste al ejemplo anterior, durante el actual gobierno que pautó innecesariamente millonadas, se han producido diferentes hechos como la sindicación y denuncia de la internación sin revisión y pago de impuestos de más de cien furgones de mercaderí­a a través de la Secretaria de Obras Sociales de la Esposa del Presidente, sin que este señalamiento haya merecido mayor cobertura en la prensa escrita, tampoco produjo la formación de comisión alguna por el Congreso, la Contralorí­a o el Ministerio Público, lo que contrasta con la denominada «Conexión Panamá».

Otro ejemplo de manipulación de la cúpula es la noticia publicada de «Q19 millones del EMP cobrados en los últimos dí­as de Ramiro de León», atribuida al candidato del Partido Patriota. Noticia que mereció seis hojas en dos diferentes dí­as en el medio que la publicó y se murió, cobertura que contrasta con los cientos de páginas que se le han dado a la «Conexión Panamá». El tema fue ignorado por el resto de medios, el diario que la publicó incluso en una posterior noticia sobre el tema de la vinculación de la polí­tica y el crimen organizado, produjo el despedido de dos de sus principales investigadores, hecho criticado por Jorge Palmieri, Estuardo Zapeta y Haroldo Shetemul y por Mirador Electoral y la Revista Sala de Redacción.

¿Por qué la diferencia de manejo noticioso? la obvia respuesta es la pauta publicitaria del Estado y la influencia de la cúpula económica.

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