El presidente Otto Pérez Molina realizará una revisión física a los programas sociales, esto luego de conocer que casi el 80 por ciento de los beneficiarios no necesitaban la ayuda. La revisión incluye una comparación entre los inventarios, pues lo entregado, se asegura, no coincide con lo registrado en bodega.
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Luego de la reunión de gabinete sostenida ayer, el mandatario indicó que esta semana se realizará la calendarización física de los programas sociales, especialmente a Mi Familia Progresa y Bolsa Solidaria.
“Para ir personalmente y revisar cuáles son los hallazgos que han tenido en esos lugares”, indicó el mandatario en conferencia de prensa.
Para ampliar la información se consultó al secretario de Comunicación Social de la Presidencia, Francisco Cuevas, quien señaló que el mandatario revisará el inventario de esos programas pues hay información que no coincide en cuanto a lo entregado y lo que se registró en las bodegas.
“Va a revisar por qué la ministra nombrada de Desarrollo Social, Lucy Lainfiesta, decía que no coincide la información que está registrada en los documentos con lo que realmente está en el campo”, indicó el funcionario, además, de que tampoco coincide lo que “supuestamente se compraba con lo que se entregaba”.
Además, se revisará las condiciones de las bodegas y el estado de los productos que se repartían, así como la documentación “para tomar las acciones que correspondan”.
NO TODOS ERAN POBRES
Cuevas también refirió que, según información brindada por Lainfiesta, “casi el 80 por ciento de los que recibieron estos beneficios del Estado no vivían en las condiciones de pobreza en que estaban registrados”.
Y es por eso, agrega, que se realizará una revisión “amplia” de los listados de beneficiarios, trabajo que realizará el nuevo ministerio.
Diario La Hora intentó contactar vía telefónica a Lainfiesta, sin embargo, se informó que ella se encontraba en una reunión y que devolvería la llamada al finalizar la misma.
En una entrevista realizada por un matutino, la ministra designada señaló que “mucha gente que no era realmente pobre recibía bolsas, e incluso remesas”, y señaló que “muchos del grupo de extrema pobreza aún no están cubiertos”.
Lainfiesta dijo también que el presupuesto con que se cuenta no será suficiente para atender al 53 por ciento de la población guatemalteca que vive en extrema pobreza, pues además hay un compromiso de trabajar con los recursos asignados, pero aseguró que no cambiarán la cuota ofrecida a cambio de llevar a los niños a las escuelas y centros de salud.
CORRUPCIÓN
En declaraciones anteriores el mandatario adelantó que se encontró un alto nivel de corrupción en los programas sociales y que los primeros hallazgos revelaron que los beneficios se repartían “sin criterio, el único que prevaleció en la Bolsa Solidaria fue la atracción de voto”.
Indicó además que el único requisito que se solicitaba para poder ser beneficiario era presentar la papeleta de inscripción o empadronamiento del Tribunal Supremo Electoral, siendo este documento también la única prioridad para ser asistido por Mi Familia Progresa.
En cuanto al periodo que debe pasar para volver a entregar los beneficios, pues hasta la fecha estos están suspendidos, Cuevas indicó que la información completa la posee Lainfiesta, pero adelantó que en cuanto se instale el nuevo ministerio, los programas sociales serán otra vez otorgados.