Da tristeza el mal proceder del presidente Colom Caballeros al doblar el sueldo a los laborantes de la Contraloría General de Cuentas de la Nación. No se está en contra del gremio laboral, pero parece esta remuneración el tope de todos los despilfarros que se originaron en esta gestión, y naturalmente hubo ganancia para los que repartieron EL PASTEL; como dice un trillado adagio: En río revuelto ganancia de pescadores. Y por si fuera poco y bueno lo que ha hecho este Gobierno, dicen los medios de comunicación que se transfirieron 30 millones de quetzales para publicitar los LOGROS de la administración Colom, y limpiar la olla.
Jesús Alvizures – A-l-606839
Pero ¿cuál es el pensamiento de este Presidente al querer gastar tanto dinero en programas innecesarios, porque todos sabemos que esta fue una administración CORRUPTA?
Si salir airoso quiere de todos sus desatinos, este dinero lo debería emplear en compra de medicina para los hospitales e invertir en Seguridad y Educación, ministerios cuyo presupuesto fue recortado, ya que hubo malversación y transferencias encaminadas a otros fines. Esto está registrado en la historia, que no calla lo que otros callan. La gestación de la gratuidad existe, pero sobre bases movedizas que han dado lugar a ciertos acomodamientos, promovidos por quien fuera la Primera Dama de la Nación y dejó el barco de la economía en bancarrota.
Pues se realizaron programas sociales para que doña SANDRA llevara agua a su molino, bimotor de la política con dineros del pueblo.
No es que se quiera echar tierra al presidente Colom, pero lastimosamente sabemos que PASARí A LA HISTORIA SIN HONRA NI GLORIA, pues en todos los entes administrativos campeó la malversación, que nada ni nadie pudo detener, porque hubo compra de voluntades.
Ya se va con su eslogan: La violencia se combate con inteligencia, y en un acto irresponsable ignorando y ocultando en los nosocomios del país el fenómeno de la desnutrición.
Pero no todas las veces pueden tapar el sol con un dedo y estos preceptos decadentes de hambre, desnutrición y pobreza trascendieron.
Se quieren gastar 30 millones en babosadas sin trascendencia y dicen en círculos gobiernistas que no hay dinero, pero si no hay ahí están los prestamistas extranjeros, que más tarde ponen la soga al cuello de sus deudores.
Los guatemaltecos estamos como estamos, por la mayor parte de los Gobiernos que se han sucedido sin proyección y sin ideología, que se han dedicado en su gestión a negociar los bienes de la Nación; y nosotros, el pueblo, hemos sido ciegos, sordos y mudos, siempre hemos agachado la cabeza para aceptar el manoseo de la economía y el acomodo de las LEYES en la IMPUNIDAD.