La Policía británica informó hoy que considera un homicidio el hallazgo del cadáver de una mujer en la finca real de Sandringham.
El cuerpo fue encontrado en la amplia hacienda del este de Inglaterra el día de Año Nuevo. Jes Fry, inspector jefe de detectives, dijo que las autoridades examinan los reportes de personas desaparecidas y los casos no resueltos en todo el país para ver si hay vínculos con éste.
«Estamos en las primeras etapas de la investigación y podría ser una pesquisa muy compleja», dijo Fry el martes. «El cuerpo ya llevaba cierto tiempo allí».
Las autoridades efectuaban la autopsia hoy.
Un particular descubrió el cadáver en una zona boscosa de Anmer, una diminuta aldea situada a 185 kilómetros (115 millas) al noreste de Londres. El pequeño pueblo forma parte del predio de Sandringham, donde la familia real pasa algunos feriados.
Anmer está a unos 4,8 kilómetros (tres millas) de Sandringham House, que ha fungido como residencia privada de los monarcas británicos desde 1862. La reina Isabel II y su esposo el príncipe Felipe pasaron allí parte de la temporada navideña y también acudieron el día de Año Nuevo.
La finca abarca más de 8.000 hectáreas (19.768 acres) en el condado de Norfolk. Sandringham House y sus jardines ocupan 24 hectáreas (59 acres) y hay 240 hectáreas (590 acres) de bosques y campos en una sección abierta al público en forma gratuita todo el año, según indica el sitio en internet de Sandringham.
Además cuenta con dos granjas de sementales y una de fruta. La hacienda emplea a más de 100 personas de tiempo completo.
El Palacio de Buckingham canalizó a la Policía todas las preguntas en torno al cadáver.