Monti advierte que la turbulencia financiera aún no cesa


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Los costos de los préstamos para Italia cayeron hoy por segundo dí­a seguido, pero el primer ministro Mario Monti advirtió que aún hay medidas por tomar para convencer a los mercados financieros de que el paí­s puede manejar sus elevadas deudas.

Por NICOLE WINFIELD ROMA / Agencia AP

Monti dijo sentirse alentado por las subastas de bonos en las que disminuyeron los costos de los intereses, tal como exigieron los inversionistas. Indicó que su gobierno de tecnócratas, que sólo lleva mes y medio en el puesto tras la renuncia de Silvio Berlusconi, prepara un paquete de medidas para hacer que la economí­a italiana avance de nuevo, incluyendo los esfuerzos por impulsar la competencia y liberalizar el mercado laboral.

«Definitivamente no creemos que haya concluido la turbulencia en los mercados», afirmó en una conferencia de prensa después que el Tesoro italiano captó unos 7 mil millones de euros (9.200 millones de dólares) de dinero de los inversionistas.

«Podemos sentir un poco de alivio», dijo, al mostrar un gráfico del rendimiento de los bonos en los últimos ocho meses.

El resultado más esperado de la serie de subastas del jueves fue la venta por 2.500 millones de euros (3.300 millones de dólares) de bonos a diez años con un rendimiento promedio de 6,98%.

Esa es una cifra menor que el récord de 7,56% que tuvo que pagar en una subasta equivalente el mes pasado, cuando los temores de los inversionistas en torno a la capacidad del paí­s de cumplir con sus enormes deudas se exacerbaron.

Sin embargo, la tasa de rendimiento que ofrece Italia para su crucial bono a 10 años sigue incómodamente cercana al nivel del 7%, ampliamente considerado como insostenible a largo plazo.

Grecia, Irlanda y Portugal tuvieron que solicitar rescates financieros después que el rendimiento de sus bonos a 10 años superó el 7%. En los mercados secundarios, el rendimiento que ofrece Italia sigue alrededor de la marca de 7%.

Los 17 paí­ses de la eurozona cargan el peso de una crisis generada por los elevados niveles de deuda gubernamental en varias naciones. El hecho de que haya temores de mora de pagos en esas deudas significa que los inversionistas en bonos gubernamentales exijan un interés cada vez mayor.

Si un paí­s ya no puede pedir préstamos baratos con el fin de pagar los bonos que están venciendo, termina requiriendo un rescate financiero o entra en mora.