El incremento de la producción de biocombustibles en Brasil no disminuirá los cultivos para alimentos ni aumentará el hambre en el mundo, dijo hoy el presidente Luiz Inacio Lula da Silva.
«Yo no sé todavía cual es la base científica de las críticas», dijo Lula al referirse a las advertencias de los presidentes de Cuba, Fidel Castro, y Venezuela, Hugo Chávez, sobre un eventual aumento del hambre mundial a causa del incremento de la producción de biocombustibles.
El mandatario brasileño, que viajó a Venezuela para participar en la primera Cumbre Energética Sudamericana, dijo que espera tener allí la oportunidad de discutir ese asunto con los presidentes de la región.
«Obviamente, nosotros tenemos un inmenso territorio, no solo en Brasil sino en todos los países de Sudamérica, en ífrica, que podrán tranquilamente combinar la producción de oleaginosas para producir biodiesel, de caña para producir etanol, y al mismo tiempo producir alimentos», dijo Lula.
«Lo que necesitamos es ser racionales, trabajar con mucho cuidado y tener una política de Estado que oriente (a los agricultores) dónde y que será producido», agregó.
El cultivo de la caña de azúcar ocupa este año 5,8 millones de hectáreas (12,60% del área agrícola total) en Brasil, según la Compañía Nacional de Abastecimiento (Conab).
El mayor productor mundial de azúcar y etanol espera producir 30 millones de toneladas de azúcar y 17.640 millones de litros de etanol en la cosecha 2006-2007, según Conab.
El consumo de etanol tuvo un enorme crecimiento en los últimos años, con el aumento de ventas de automóviles que funcionan indistintamente con gasolina y ese combustible. Una parte de esa producción se destina a la exportación.