Corea del Norte dejó expirar hoy el primer plazo para empezar a desmantelar su programa nuclear, mientras en Pekín Estados Unidos consultaba a los otros cuatro países que negocian con los norcoreanos su desnuclearización para adoptar una posición común.
«No hay novedades en lo que se refiere al tema financiero del Banco Delta Asia» (BDA), el banco de Macao donde se encuentra congelado un fondo norcoreano de 25 millones de dólares desde 2005, declaró a la AFP una fuente oficial norcoreana en Pyongyang sin añadir más detalles.
El régimen comunista norcoreano dejó expirar este sábado el plazo de dos meses que se le concedió para empezar a cerrar su principal instalación nuclear, la de Yongbyon, en el norte del país.
Corea del Norte se comprometió a que el cierre de Yongbyon sería el primer paso de cara al desmantelamiento total de sus instalaciones nucleares, en un acuerdo firmado el 13 de febrero en Pekín con los cinco países con los que negocia el fin de su programa nuclear (Corea del Sur, Estados Unidos, Rusia, China y Japón).
Sin embargo, los norcoreanos pusieron en dicho acuerdo como condición irrenunciable el desbloqueo de sus fondos congelados en el banco de la región china de Macao a raíz de unas acusaciones estadounidenses de lavado de dinero.
Los fondos norcoreanos en Macao han sido desbloqueados, pero su traslado efectivo no ha podido aún ser realizado por problemas técnicos.
En este contexto, el negociador estadounidense, Christopher Hill, viajó a Pekín para hablar con su homólogo chino, Wu Dawei, «sobre la situación en la que nos encontramos respecto al acuerdo del 13 de febrero», como dijo el propio Hill.
El negociador estadounidense subrayó la importancia de saber «cómo los chinos ven el futuro».
«La opinión de los chinos es primordial. Ellos son los anfitriones (de las conversaciones multilaterales sobre el programa nuclear norcoreano). Y también trabajaron mucho… Por lo tanto, estoy seguro de que tienen una opinión sobre lo que (Corea del Norte) hace», añadió Hill.
El responsable estadounidense precisó que también hablará, aunque telefónicamente, con otros de sus homólogos en la mesa negociadora, concretamente el japonés, el surcoreano y el ruso, si bien precisó que no tiene previsto hablar con el negociador norcoreano, Kim Kye-gwan.
«No hay mucho dinamismo en este momento», reconoció Hill. «Desearíamos ver un nivel de esfuerzo parecido por parte de (Corea del Norte), nivel que, francamente, no vemos», lamentó el norteamericano al subrayar que la fecha límite de este sábado es «muy importante».
Por su parte, en Washington, el gobernador del estado de Nuevo México, Bill Richardson, recién llegado de una misión privada en Corea del Norte, se declaró confiado en que Corea del Norte respetará sus compromisos.
«Pienso que se comprometieron en la primera y la segunda etapa del acuerdo que conduce al comienzo de la desnuclearización (norcoreana). Probablemente no respeten la fecha límite, pero en los próximos días cumplirán con sus obligaciones», dijo Richardson.
El viernes, Hill advirtió a Corea del Norte que se expondría a una respuesta por parte de los otros participantes en las conversaciones si se negaba a dar una señal positiva, como podría ser invitar a los inspectores de la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA).
«Deben dirigirse a la AIEA. Esa será, sin duda, una indicación de que se preparan para hacer lo que acordaron en febrero», añadió Hill.
El regreso de los inspectores de la AIEA –que Corea del Norte expulsó de su territorio en 2002– forma parte de los compromisos estipulados en el acuerdo del 13 de febrero.
China pidió a los países involucrados en las negociaciones nucleares que tengan paciencia con Corea del Norte, al expirar hoy el plazo para que los norcoreanos comiencen a desmantelar su planta de Yongbyon, afirmó el emisario norteamericano Christopher Hill en Pekín.