LA HAYA / Agencia AP
John Hocking, funcionario de admisión del tribunal para crímenes de guerra en Yugoslavia, dijo que el ex comandante militar serbobosnio comprendió claramente cuando le habló el martes por la noche, poco después que Mladic fue extraditado de Belgrado en un avión del gobierno serbio.
Hocking describió las reglas de la detención que regirán durante la estada del ex general hasta que concluya su juicio por genocidio y por orquestar atrocidades serbias durante la guerra en Bosnia-Herzegovina.
El funcionario agregó que un médico que examinó al detenido, de 69 años, no encontró ningún problema médico que le impida ser trasladado a la unidad de detención, pero no entró en detalles sobre el estado de salud de Mladic por cuestiones de privacidad.
El abogado de Mladic en Belgrado dijo que el ex general está demasiado débil mental y físicamente como para enfrentar un complejo y prolongado juicio por crímenes de guerra. Su familia afirma que ha padecido al menos dos ataques de apoplejía mientras estaba prófugo.
Mladic comparecerá ante el tribunal el viernes por la mañana por primera vez cuando un juez le pedirá que confirme su identidad y le dará la oportunidad de declarar su posición ante 11 cargos de genocidio, crímenes de guerra y crímenes de lesa humanidad.
Al igual que su viejo aliado y jefe político Radovan Karadzic hace tres años, Mladic podría declinar declarar su posición en su primera comparecencia para demorar su respuesta formal hasta un mes.
El fiscal principal, Serge Brammertz, elogió al presidente serbio Boris Tadic por haber arrestado a Mladic, pero también recordó cuánto tiempo pasó antes de que fuera capturado el fugitivo más buscado en Europa por crímenes de guerra, que fue acusado por primera vez en 1995.
«Dieciséis años es demasiado tiempo para esperar que se haga justicia», dijo el fiscal a la prensa.
Brammertz consideró improbable que busque juzgar a Mladic junto con Karadzic, pero no lo descartó totalmente.
Karadzic, que fue presidente de la autodeclarada república serbobosnia, fue arrestado en 2008 y está sometido a juicio desde hace 18 meses por 11 cargos prácticamente idénticos a los de Mladic.