La rectora de la Universidad de California en David, Linda Katehi, se defendió ayer de las críticas por el reciente uso de aerosol de pimienta contra manifestantes pacíficos, al tiempo que surgía información sobre el policía en el centro de ese incidente.
El video en que el teniente de la Policía de la universidad John Pike y otro agente, ambos con equipos antidisturbios, lanzan un gas naranja hacia las cabezas de varios manifestantes que estaban sentados en el piso desencadenó un escándalo nacional desde que comenzó a circular en línea la noche del viernes.
Numerosos estudiantes de congregaron el martes en el campus por segundo día en esta semana a fin de condenar la violencia, y también apremiaron a las autoridades universitarias para que la policía sea obligada a asistir a un entrenamiento sobre manejo de situaciones delicadas.
Katehi, sujeta a críticas por el incidente del viernes, se defendió durante una reunión pública la noche del martes. En un auditorio colmado por más de mil estudiantes, explicó que le pidió a la Policía el retiro de las carpas del patio de la universidad, pero que no les ordenó que quitaran a los manifestantes por la fuerza.
«En forma explícita le ordené al jefe de la policía que la violencia debía evitarse a toda costa», afirmó. «Eso era en absoluto lo último que hubiera querido que ocurriera».
La rectora enfatizó que los estudiantes tienen el derecho de manifestarse pacíficamente.
«Debido a que los campamentos han estado prohibidos desde hace mucho tiempo por la política de la Universidad de California, le ordené a la policía sólo retirar las tiendas de campaña», dijo. «Mis instrucciones fueron de no detenciones y no fuerza policial».
Pike, otro agente y el jefe de la policía del campus fueron puestos en licencia administrativa con paga por el incidente que atrajo la atención internacional hacia la universidad de 32 mil alumnos que se encuentra al oeste de la capital del estado.
No todos los estudiantes en el auditorio quedaron satisfechos con la respuesta de Katehi, quien el lunes asistió a una marcha en el campus y le ofreció disculpas a los estudiantes.
«No dijo ‘lamento que hice esto»’, dijo Puneet Kamal, de 22 años y estudiante de ciencias ambientales. «Â¿Dónde queda la culpa?»
Pike, uno de los agentes que arrojaron gas lacrimógeno a los estudiantes, es un sargento retirado de los infantes de marina, que ha sido distinguido por su labor policial en el campus, pero también apareció en una demanda por discriminación contra la universidad.