Reportan nuevo incidente en planta nuclear


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Las autoridades detectaron hoy gas radiactivo asociado con una fisión nuclear en la planta de Fukushima Dai-ichi, la cual quedó averiada en marzo por un maremoto, indicando que podrí­a haber un nuevo problema en uno de sus reactores.

Por ERIC TALMADGE TOKIO / Agencia AP

Como medida de precaución, el personal comenzó a inyectar ácido bórico que neutraliza las reacciones nucleares por un conducto de enfriamiento cuando detectaron la presencia de xenón radiactivo que podrí­a haber surgido por una fisión nuclear en el reactor. De momento se desconoce si habí­a ocurrido la fisión.

La compañí­a operadora de la planta, Tokyo Electric Power Co., señaló que no habí­a incremento en la temperatura del reactor, en la presión o en niveles de radiación. La compañí­a dijo que el material radiactivo dentro del reactor no habí­a llegado a un punto crí­tico, cuando las reacciones nucleares son autosuficientes, y que la detección del xenón no tendrí­a un mayor impacto en las acciones por mantener frí­o y estable al reactor.

El vocero de la empresa, Osamu Yokokura, afirmó que no se habí­a detectado ninguna filtración radiactiva fuera de la planta.

Hiroyuki Imari, un vocero de la Agencia de Seguridad Industrial Nuclear, dijo que la detección de gas no indicaba al parecer un problema mayor, pero que su causa es investigada.

La planta fue el sitio del peor desastre nuclear en el mundo desde Chernobil en 1986.

Las autoridades han mantenido en vigencia una zona de exclusión con un radio de 20 kilómetros (12 millas) en torno a la planta desde el terremoto y tsunami del 11 de marzo que causó graves problemas en la instalación, al norte de Tokio. Tres de sus reactores se fundieron, lo cual provocó incendios y varias explosiones.

El más reciente revés ocurre mientras TEPCO habí­a reportado un importante progreso para estabilizar la planta. La empresa informó que esencialmente habí­a alcanzado un «apagón frí­o» de la planta, lo que significa que las temperaturas en los reactores son constantes y están bajo control.

A pesar de eso, un panel gubernamental considera que tomará al menos 30 años para desmantelar de forma segura a la instalación.