Un experto en adicciones que declaró como testigo a favor del médico acusado de la muerte de Michael Jackson le dijo ayer al jurado que según los registros médicos, cree que el cantante desarrolló una adicción a un poderoso analgésico en los meses previos a su muerte.
El doctor Robert Waldman dijo que Jackson estaba recibiendo «dosis más grandes que lo normal» del analgésico Demerol.
«Creo que existe evidencia de que dependía del Demerol, posiblemente», declaró Waldman. El testigo añadió que también cree que Jackson era adicto a opiáceos en mayo del 2009, el mes previo a su deceso.
Waldman dijo que uno de los síntomas del síndrome de abstinencia de Demerol es insomnio. Jackson se quejaba de que no podía dormir mientras se preparaba para una serie de conciertos que marcaría su regreso a los escenarios.
Los abogados del doctor Conrad Murray han sugerido que Jackson padecía del síndrome de abstinencia del Demerol previo a su fallecimiento. No se hallaron rastros de la droga en su sistema durante su autopsia.
La defensa sostiene que Jackson consumió él mismo una dosis fatal del anestésico propofol, que dicen estaba usando para ayudar a dormir.
Las autoridades hallaron propofol en los restos de Jackson y sostienen que Murray le dio al cantante la dosis fatal de la droga.
Jackson recibió inyecciones de Demerol de su antiguo dermatólogo, el doctor Arnold Klein, quien no ha sido acusado ni será llamado al estrado.
Waldman dijo que no ha tratado ningún caso de adicción a Demerol recientemente.
Murray se ha declarado inocente.