Seguridad ante todo



A pocas horas del inicio formal del feriado de la Semana Santa, aunque ya buena parte de la población se encuentre gozando del descanso, es importante señalar que en estas fechas ocurre una cantidad extraordinaria de percances de distinto tipo que nos deben obligar a todos a ser mucho más cuidadosos y exigentes en materia de seguridad. Y obviamente la primera recomendación que debe hacerse a los ciudadanos es no excederse en el consumo de licor porque muchos de los accidentes que ocurren tienen relación con abusos y desmanes en ese campo.

Se trata de un perí­odo especial que los guatemaltecos aguardamos anualmente con interés e ilusión para gozar de un descanso tradicional que nos permite desplazarnos a playas, lugares de recreo o, simplemente, atender nuestras devociones religiosas en el marco de las añejas tradiciones. En cualquier caso, sea que uno permanezca en su vivienda o que la deje para viajar a otro sitio, es importante también tomar en cuenta que vivimos tiempos en los que hay que adoptar precauciones para no encontrarse con la sorpresa de que los ladrones hagan de las suyas.

Creemos que cualquier esfuerzo que se haga para redoblar las medidas de seguridad es importante, sobre todo en protección de la familia. La congestión en las principales rutas hace que la cantidad de vehí­culos exponga a los viajeros a mayor cantidad de riesgos y siendo el caso que no nos distinguimos precisamente por ser respetuosos de las normas y de los derechos ajenos, hay que andar con redobladas precauciones para no exponernos ni exponer a nuestros familiares.

Los cuerpos de socorro han adelantado campañas importantes para contribuir a la reducción de riesgos y de eventualidades que pongan en peligro la vida de los guatemaltecos y habrá que atender todas y cada una de ellas para que estas fiestas discurran en la mayor tranquilidad y que sean efectivamente una oportunidad para que las familias puedan disfrutar de un sano y reparador descanso.

Ojalá que las fuerzas de Policí­a, tan importantes en estas ocasiones para prevenir, sepan comportarse de conformidad con sus atribuciones y que lejos de actuar en perjuicio de la población aumentando la inseguridad y la zozobra, puedan ser un factor de tranquilidad. Y es que no se puede ocultar que hoy en dí­a un puesto de registro y control en el que estén elementos de la PNC, lejos de brindar seguridad a los ciudadanos los pone en el avispero por los antecedentes abundantes de abusos cometidos en contra de población honrada. Los jefes deberán ser exigentes para hacer que toda la fuerza policial se comporte como corresponde y ayude a la población.

En resumidas cuentas, son dí­as en los que todos tenemos que poner de nuestra parte para evitar tragedias y desgracias. La seguridad ante todo tiene que ser el lema del descanso.