El quarterback de los Jets de Nueva York Mark Sánchez aseguró ayer que la fractura de nariz que sufrió en la derrota ante los Raiders de Oakland «no es gran cosa» y que ya se siente mucho mejor que el domingo pasado. Sánchez sufrió una «fractura menor» en la nariz, según el equipo, pero jugará el próximo partido, de visita en Baltimore.
NUEVA YORK Agencia AP
El quarterback de ascendencia mexicana sufrió el golpe en una captura de Kamerion Wimbley en el tercer cuarto y terminó el partido con una pantalla protectora en el casco, que volverá a usar en los próximos partidos.
«Me romperé la nariz todos los partidos si vamos a ganar», dijo Sánchez durante su aparición semanal en la radio ESPN de Nueva York.