Ese proceso electoral ha evidenciado la vulnerabilidad del sistema de partidos polí­ticos y la necesidad por reformar su legislación, sin embargo, quienes tienen que ayudar en este cambio tendrán que ser los propios partidos polí­ticos, opinan expertos.

Esta última semana el Tribunal Supremo Electoral (TSE) ha sido objeto de duras crí­ticas por parte de los propios fiscales de los partidos polí­ticos que han acusado a esta instancia de no ser eficiente en el proceso electoral recién pasado.
Una de las mayores crí­ticas es en relación al atraso que se ha tenido en el conteo de votos, ya que a casi 15 dí­as de haberse llevado a cabo las elecciones aún no se tienen los resultados totales.
Jorge Arévalo, fiscal de la Unidad del Cambio Nacional -UCN- fue quien criticó a los magistrados por la falta de preparación de los comicios y señaló que “fue un fracaso el proceso electoral”, algo que provocó profundas molestias en la magistrada presidenta de esta institución, Marí­a Eugenia Villagrán.

Los analistas Adrián Zapata del Instituto de Análisis e Investigación de los Problemas Nacionales (Ipnusac) y Alejandro Balsells del Centro de Defensa de la Constitución (Cedecon) concuerdan en la urgencia por democratizar los partidos polí­ticos, el control en el financiamiento y las reformas a la ley orgánica del TSE.

La democratización a los partidos polí­ticos resulta uno de los temas prioritarios que permite el desarrollo y fortalecimiento del sistema de partidos, “los partidos son simplemente maquinarias electorales que pertenecen a un caudillo que quiere ser presidente”, se refiere Zapata.

A este tema corresponde el tener partidos ideológicos y programáticos.

El director del Ipnusac agrega que la otra reforma por hacer es el control del financiamiento ya que lo que ha sucedido en los últimos procesos electorales es una mercantilización de la polí­tica.

“El Tribunal tiene más dientes de lo que se cree, pero claro que hay que fortalecerlo”, agrega Balsells en cuanto al fortalecimiento de la institucionalidad pública ya que sin esto no habrá manera de que se cumpla el rol de esta institución.

El primer  año del nuevo ciclo polí­tico ofrece la oportunidad de hacer estas reformas, sobre todo tomando en cuenta que parte del discurso polí­tico de varios candidatos para diputados se centró en las reformas que se necesitan hacer a la Ley Electoral y de Partidos Polí­ticos.

“Hay que aprovechar esa conciencia creada y esas promesas por cambiar las reformas a la ley electoral ya que se ha demostrado la vulnerabilidad del sistema y en cada ciclo la situación es peor”, aseveró el director del Ipnusac.
El Presidente del Congreso de la República, Roberto Alejos, ha dicho en ocasiones anteriores que las reformas a esta Ley podrí­an tener espacio para ser conocidas en esta legislatura ya que cuentan con el dictamen favorable, por lo que solo harí­a falta conocerlas en sus tres lecturas en el pleno del Legislativo.

Aunque la tarea por aprobarlas queda en el Congreso, también es responsabilidad de los liderazgos que tienen los partidos polí­ticos para que éstas sean aprobadas a conciencia, “los partidos tienen que ser muy responsables porque esos liderazgos se benefician de estas debilidades”, agregó Zapata.