Los obreros que trabajan en la renovación del estadio Maracaná para el Mundial de 2014 decretaron otra huelga para exigir mejores condiciones laborales.
Los trabajadores detuvieron las obras durante cuatro días hace una semana, y ahora quieren más mejoras a las condiciones en el estadio que albergará la final del Mundial. El Maracaná también será utilizado en la Copa Confederaciones de 2013 y los Juegos Olímpicos de 2016.
El líder del sindicato, Nilson Duarte, le dijo hoy que los patronos no estaban cumpliendo con el acuerdo logrado para poner fin a la huelga de la semana pasada. Los obreros dijeron que quieren un médico durante el turno nocturno y mejores comidas.
No fue posible conseguir de inmediato una reacción de las autoridades.