La secretaria de Estado norteamericana, Condoleezza Rice, anunció hoy en Jerusalén que el presidente palestino, Mahmud Abas, y el primer ministro israelí, Ehud Olmert, se reunirán cada dos semanas con el fin de buscar un acuerdo de paz, aunque declinó hablar de conversaciones finales.
Sin embargo, según la radio militar israelí, Rice se contrarió por el rechazo de Olmert de comprometerse con el presidente Abas sobre un Estado palestino.
«Los Estados árabes deben abrirse hacia Israel (…) a fin de mostrarle que han aceptado su lugar en Oriente Medio», afirmó en conferencia de prensa.
En un balance de su gira por Oriente Medio, la jefa diplomática estadounidense hizo un llamado a los estados árabes para que avancen a partir del acuerdo de paz presentado en 2002 y comprometan a Israel.
Rice anunció que Olmert y Abas «acordaron reunirse cada dos semanas», y ella se entrevistará con ambos líderes «en paralelo».
«Israel y los palestinos deben clarificar un horizonte político de manera conjunta», destacó la secretaria de Estado, pero apuntó que no es el momento del «punto final de las negociaciones».
Rice tuvo que comedir sus esperanzas de avanzar en el proceso de paz, mediante conversaciones entre Olmert y Abas sobre «asuntos fundamentales», como sugirieron los palestinos, luego de hallar oposición israelí, de acuerdo a lo reportado por medios de Israel y autoridades estadounidenses.
Olmert se resistió, argumentando que tales conversaciones premiarían a Abas, a pesar de que no ha cumplido su promesa de liberar un soldado israelí capturado en Gaza por militantes palestinos, según medios de prensa y autoridades.
Además, el primer ministro israelí rechazó al parecer que Estados Unidos supervise las negociaciones entre ambas partes, afirmaron diversas autoridades.
«Estados Unidos no tiene que sacrificarnos para mejorar sus relaciones con Arabia Saudita», declaró un allegado de Olmert citado por la radio militar.
Rice dio a conocer que los esfuerzos de paz se han visto afectados por la formación del gobierno palestino de unión entre el partido moderado Fatah y el movimiento islamista Hamas, considerado por Occidente como un grupo terrorista.
El gobierno de coalición ha rechazado cumplir con las demandas impuestas por el Cuarteto para Oriente Medio (Estados Unidos, Rusia, la Unión Europea y la ONU), que le solicita renunciar a la violencia, reconocer a Israel y aceptar acuerdos de paz anteriores.
Por su parte, Israel se niega a reconocer al gobierno palestino.
El proyecto árabe de paz de 2002, desempolvado días antes de la cumbre de la Liga Arabe de hoy, establece el reconocimiento de Israel por parte de los Estados árabes, a cambio de que Israel se retire de todos los territorios árabes ocupados, así como la creación de un Estado palestino y el retorno de los refugiados.
Ayer, los ministros árabes de Relaciones Exteriores respaldaron el plan y acordaron establecer grupos de trabajo que estarían en contacto con todas las partes involucradas, incluso Israel.
En un cambio de parecer, Olmert se ha manifestado de forma positiva sobre el proyecto, asegurando estar dispuesto a participar en una reunión que podría acercar a líderes árabes y palestinos al Cuarteto.
Israel ha solicitado retirar la cláusula de los refugiados del proyecto de paz, situación que ha sido rechazada por los Estados árabes.
La gira de Rice por Oriente Medio comenzó el sábado y comprendió estaciones en Egipto, Israel, Jordania y los territorios palestinos.
La secretaria de Estado tenía previsto retornar hoy a Washington.
El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, llegó hoy a la capital de Jordania, Amman, donde se reunió con el rey Abdalá II en el marco de su gira por Oriente Medio que apuesta a resucitar el proceso de paz árabe-israelí.
Ban y el monarca jordano viajarán luego por separado a Riad, donde mañana tendrá lugar la cumbre de la Liga írabe.
El secretario general de la ONU llegó a Jordania procedente de Israel, donde evocó ayer la posibilidad de una inédita reunión entre árabes e israelíes bajo la égida del Cuarteto internacional para Oriente Medio, integrado por Estados Unidos, la Unión Europea, la ONU y Rusia.
«Es una idea muy interesante y útil que debe tomarse en consideración, pero requiere consultas», declaró Ban tras una reunión en Jerusalén con el primer ministro israelí, Ehud Olmert.
Los jefes de la diplomacia de los países árabes decidieron ayer en Riad reactivar un plan de paz adoptado en 2002 que prevé una normalización de las relaciones con Israel a cambio de su retirada total de los territorios árabes ocupados desde 1967 y de una solución al tema de los refugiados palestinos.
Ban se había reunido el domingo con el presidente palestino, Mahmud Abas, en Cisjordania. Inció su gira con una visita sorpresa a Irak y luego viajó a Egipto. Tras visitar Arabia Saudí tiene previsto asimismo trasladarse a Líbano.