Japón y Chile firmaron hoy un acuerdo de libre comercio que suprimirá el 92% de los aranceles sobre los intercambios entre los dos países, informó el ministerio nipón de Asuntos Exteriores.
El acuerdo fue rápidamente negociado por Tokio y Santiago, en apenas siete meses entre febrero y septiembre del pasado año. Hoy fue formalmente firmado por el canciller japonés, Taro Aso, y su homólogo chileno, Alejandro Foxley, que efectúa una visita oficial de tres días a Japón.
El tratado prevé que, antes de 10 años, la gran mayoría de las exportaciones japonesas a Chile y de las exportaciones chilenas a Japón queden totalmente exentas de aranceles.
Chile levantará de inmediato el arancel del 6% que aplica sobre los automóviles japoneses, así como sobre la maquinaria, los aparatos eléctricos y productos como el té verde, el saké (alcohol de arroz) y la salsa de soja.
Por su parte, Japón suprimirá progresivamente el arancel del 3% que aplica al cobre chileno, el del 3,5% sobre el salmón y el del 17,6% sobre el vino, entre otros. También disminuirá los aranceles que aplica sobre la carne de cerdo, de vacuno y de pollo chileno.
Sin embargo, productos agrícolas sensibles como el arroz, sobre el cual pesan elevadísimos aranceles en Japón, quedarán excluidos del acuerdo para seguir protegiendo a los granjeros nipones.
Chile es el mayor proveedor de cobre de Japón. Tokio también importa de Chile el 25% del salmón que consume.
Chile ya firmó en noviembre de 2005 con China el primer acuerdo de libre comercio jamás alcanzado por Pekín con un país iberoamericano.
Japón, que es el segundo receptor de las exportaciones chilenas, compite ferozmente con China para abastecer de materias primas su gigantesca economía.
Tokio firmó hace cuatro años con Singapur el primer tratado de libre comercio de su historia. Desde entonces ha alcanzado acuerdos similares con México, Malasia, Tailandia y Filipinas.
Chile, por su parte, ya tiene acuerdos de libre comercio con unos 40 países, incluidos China, Estados Unidos, la Unión Europea y México.