Tony Romo se siente como un niño en un campamento. Se divierte con sus compañeros y dice que querría jugar diariamente.
Después de perderse los últimos diez partidos de los Cowboys de Dallas en la campaña anterior por una fractura en la clavícula izquierda, el quarterback tres veces electo para el Pro Bowl está listo de nuevo.
«Me siento bien, emocionado de jugar al fútbol americano y estoy ansioso de que comiencen los partidos», dijo el martes Romo, quien lleva casi tres semanas de entrenamiento con Dallas pero pocas veces se ha detenido a hablar con la prensa después de las prácticas.
Romo ha lucido fuerte durante los entrenamientos. El jueves por la noche, completó tres de cinco pases para 33 yardas en su única serie ofensiva del partido que marcó el comienzo de la pretemporada. Fue la primera vez que participó en un encuentro desde el 25 de octubre, cuando se lesionó frente a los Giants de Nueva York.
No ha habido secuelas de la lesión en el hombro izquierdo del quarterback diestro, quien dice que sólo siente el dolor muscular característico de esta época del año.
«Es algo normal», aseguró. «Me siento sólo como si estuviera en los entrenamientos».
Romo tuvo un récord de 1-5 como titular la temporada anterior, la mayor cantidad de derrotas y el menor número de encuentros de titular en su carrera. Pero en el 2009 completó 347 de 550 pases para 4.483 yardas, sólo vio interceptados nueve de sus envíos —la menor marca en su carrera— y logró su primera victoria en los playoffs.
Jason Garrett, quien era coordinador ofensivo y había trabajado cerca de Romo durante las últimas cuatro temporadas, es ahora el entrenador.
«El se ve normal», dijo Garrett. «Se ha movido bien, evidentemente está en buena forma y no parece que la lesión le haya afectado en modo alguno en cuanto a su movimiento o su capacidad de lanzar pases».
Romo, quien no fue siquiera seleccionado en el reclutamiento colegial, se convirtió en el mariscal de campo titular de los Cowboys cuando habían transcurrido apenas siete partidos de la campaña del 2006. Su talento ha florecido bajo las órdenes de Garrett.
«El pareció cómodo en el partido de la otra noche, así que no creo que haya problemas para que se adapte a jugar en otros encuentros. Al menos, no tendrá más problemas que en un año típico», dijo Garrett. «Para mí, es el mismo».
Como titular, Romo tiene un récord de 39-22, incluso tomando en cuenta la decepcionante temporada del 2010. Los Cowboys tenían la esperanza de ser el primer equipo de la historia en jugar un Super Bowl en su estadio pero terminaron con una foja de 6-10.