El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, intenta en El Cairo dar un impulso al proceso de paz árabe-israelí, un esfuerzo al que se une la secretaria de Estado norteamericana, Condoleezza Rice, que inicia hoy en Egipto una gira por Oriente Medio.
Ban saludó hoy la formación del gobierno palestino de unión nacional al tiempo que le instó a cumplir con las expectativas de la comunidad internacional, en declaraciones a la prensa en El Cairo, adonde llegó el jueves tras una etapa en Bagdad.
«Esperamos que el gobierno de unión palestino responda a las expectativas de la comunidad internacional en vistas a la paz y a la seguridad en la región», manifestó el surcoreano tras entrevistarse con el presidente egipcio, Hosni Mubarak.
Se trata de la primera gira de Ban por esta región, una de las más desgarradas del mundo, desde su nombramiento en enero a la cabeza de las Naciones Unidas.
Ban señaló que se reunirá con el presidente palestino y jefe de Fatah, Mahmud Abas, durante su visita mañana a los territorios palestinos, pero no se encontrará con el primer ministro, Ismail Haniyeh, del movimiento islamista Hamas.
El Cuarteto para Oriente Medio (Estados Unidos, Unión Europea, ONU, Rusia) exige como condición previa al levantamiento de su boicot al gobierno palestino que éste reconozca de forma explícita el Estado de Israel, acepte los acuerdos israelo-palestinos y renuncie a la violencia.
Pese a ello, europeos y estadounidenses convinieron aguardar las primeras decisiones de este gobierno formado hace apenas unos días entre Hamas y Fatah, antes de determinar si mantienen su postura o suavizan las sanciones.
Por otro lado, el secretario general de la ONU subrayó la importancia de otro conflicto abierto, el de Darfur, y urgió a la comunidad internacional a poner fin a la guerra civil que sacude esta región del oeste de Sudán desde hace cuatro años.
«La comunidad internacional debe hacer todo lo que esté en sus manos para resolver la terrible crisis humanitaria en Darfur», insistió Ban.
Expresó su voluntad de que Mubarak y «otros dirigentes de la región examinen este problema con más seriedad para apoyar los esfuerzos de la ONU y de la Unión Africana (UA) para hacer frente a la situación».
El gobierno sudanés se opone al despliegue de una fuerza conjunta de ’cascos azules’ y de la UA, contemplado en una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU sobre el conflicto de Darfur, que ha dejado más de 200 mil víctimas y unos dos millones de desplazados, según el organismo internacional.
Ban viajará hoy a Israel, antes de desplazarse a los territorios palestinos y a Jordania.
El próximo 28 de marzo asistirá en Riad a la sesión de apertura de la cumbre de la Liga Arabe y finalizará su gira en Líbano.
Su periplo coincide con una nueva misión en la región de la secretaria de Estado norteamericana, Condoleezza Rice, esperada hoy en Assuan, en el sur de Egipto, para una reunión con sus homólogos del Cuarteto Arabe, integrado por el país anfitrión, Jordania, Arabia Saudí y los Emiratos Arabes.
Rice viajará asimismo a Jerusalén, donde se entrevistará mañana con el secretario general de la ONU.
Esta intensa actividad diplomática tiene lugar después de que el gobierno hebreo manifestara estar abierto a examinar la iniciativa de paz árabe, promovida por Riad en 2002, y hasta ahora rechazada por israelíes y estadounidenses.
Estados Unidos espera que durante la cumbre de la Liga Arabe se relance esta iniciativa, que prevé el reconocimiento de Israel por parte de los países árabes a cambio de un retorno a las fronteras de 1967, la creación de un Estado palestino y la resolución de la cuestión de los refugiados palestinos.