El gobierno de unidad nacional de Líbano se derrumbó hoy luego que varios ministros de Jezbolá y sus aliados dimitieron del gabinete, cuando se esperan los resultados de una investigación respaldada por la ONU sobre el asesinato del ex primer ministro Rafik Hariri en 2005.
Las renuncias generaron la peor crisis política desde 2008, en uno de los países más inestables de Medio Oriente.
Hariri estaba el miércoles en Washington, donde se reunió con el presidente Barack Obama. Hariri no hizo declaraciones al salir. Momentos después partió en un avión a París, para sostener consultas sobre el colapso de su gobierno, informó un funcionario libanés.
Se anticipa que el tribunal que investigó el crimen de Hariri acusará a integrantes de Jezbolá, lo que muchos temen podría reanimar las divisiones sectarias que han aquejado al país durante décadas.
«Este gabinete se ha convertido en una carga para los libaneses, es incapaz de hacer su trabajo», dijo el ministro de Energía, Jibran Bassil, durante una conferencia de prensa en la que anunció las dimisiones junto a otros miembros del gabinete.
«Estamos dando la oportunidad de que otro gobierno se haga cargo», agregó.
Jezbolá, apoyado por Irán y Siria, calificó al tribunal de «proyecto israelí» e instó al primer ministro Saad Hariri, hijo del político asesinado, a rechazar sus conclusiones, aún antes de que éstas fueran anunciadas.
Hariri, que tiene el respaldo de las potencias occidentales, se ha negado a suspender su cooperación con el tribunal. Su oficina no hizo declaraciones en lo inmediato sobre las renuncias, que dan fin a un gobierno de un año de duración.
La renuncia llegó tras el fracaso de una iniciativa diplomática de Siria y Arabia Saudí que buscó aliviar las tensiones en Líbano. No hubo muchos detalles, pero las conversaciones recibieron elogios por ser una posible solución de origen árabe y no una ofrecida por las potencias de Occidente.
Bassil dijo que los ministros decidieron renunciar luego que Hariri «sucumbió a las presiones extranjeras y estadounidenses» e ignoró la iniciativa siria-saudí.
Tampoco el tribunal hizo declaraciones en lo inmediato el miércoles.
Hariri formó el gobierno de unidad en noviembre de 2009, pero éste no logró funcionar en plenitud por sus profundas divisiones. La investigación generó una crisis paralizante durante los últimos meses.