El asesino confeso de un político liberal paquistaní dijo a un juez los nombres de los dos hombres cuyos sermones supuestamente le llevaron a cometer el asesinato, al mismo tiempo que se difundía un video en YouTube del criminal cantando versos islámicos bajo custodia policial.
El asesinato del gobernador de la provincia de Punjab, Salman Taseer, ocurrió hace casi una semana. Aunque sorprendió a muchos en todo el mundo, miles de paquistaníes expresaron su apoyo a Mumtaz Qadri, de 26 años, quien dijo que mató al gobernador porque éste criticó leyes que imponen la pena de muerte a quien insulte al Islam.
Ese apoyo %u2014y la falta de críticas al asesinato por parte de muchos políticos%u2014 demuestran la cada vez mayor influencia de la ideología islamista de línea dura en Pakistán, un país aliado de Estados Unidos en la guerra contra los talibanes y milicianos de al-Qaida en la región.
Qadri dijo a un juez el lunes en testimonio escrito que decidió matar a Taseer tras una reunión el 31 de diciembre organizada por Shahab-e-Islam, un pequeño grupo islamista que operaba en su barrio en Rawalpindi, a las afueras de la capital, Islamabad.
Los discursos dados por un clérigo que dirige el grupo, Qari Hanif, y otro miembro, Ishtiaq Shah, jugaron un papel fundamental en su decisión, dijo.
El papa Benedicto XVI criticó el lunes las leyes antiblasfemia paquistaníes al decir que deberían ser rechazadas porque fueron usadas como pretexto para usar la violencia contra gente que no es musulmana.
Activistas en defensa de los derechos humanos también han dicho que las leyes antiblasfemia de Pakistán son usadas para resolver disputas y perseguir a minorías religiosas.
Taseer había descrito las leyes como «negras» pero no exigía que fueran anuladas. En lugar de eso, pedía que fueran reformadas para que no se diera mal uso de ellas. Taseer defendió a una mujer cristiana, Asia Bibi, que dijo que condenada a muerte erróneamente por insultar a Mahoma. El Papa también pidió su liberación.