Cuba cerró 2010 con una tasa de mortalidad infantil de 4,5 por cada mil nacidos vivos, la más baja de su historia, dijeron las autoridades.
Un reporte del periódico oficial Granma indicó ayer que en el año recién concluido se produjeron 127.710 nacimientos y en 23 municipios la tasa de fallecimiento de menores de un año fue cero.
Granma indicó que entre los factores que contribuyeron a mantener una mortalidad tan baja se encuentra la atención primaria de salud, que en Cuba es gratuita y masiva, y un esquema de vacunación de 13 enfermedades en casi el 100% de los infantes.
Además, se realizan ultrasonidos y exámenes de manera sistemática a las gestantes.
La tasa de deceso de menores antes de 1959 cuando triunfó la Revolución alcanzaba hasta el 49,7 por cada mil nacidos vivos y la cifra anterior mas baja a la presente fue de 4,7 en 2008.
En 2009 la tasa fue de 4,8 por cada mil nacidos vivos.