La labor para la conservación de los suelos que desarrollan 300 familias en seis comunidades de San Miguel Chicaj, Baja Verapaz, ha contribuido a alentar las buenas prácticas relacionadas con el manejo del recurso hídrico y la producción agrícola.
Rubén Dubón, Supervisor Departamental del Programa de Desarrollo Rural (PRORURAL), indicó que la iniciativa es coordinada conjuntamente con el Programa Mundial de Alimentos (PMA) y la Unión Europea, entidades que apoyan técnicas basadas en el diseño y manejo de los sistemas de extensión agrícola sostenibles.
William Bendfelth, Extensionista del Ministerio Agricultura, Ganadería y Alimentación (MAGA), señaló que la idea principal es impulsar y desarrollar las técnicas agrícolas sostenibles para contrarrestar los efectos negativos de la degradación de los suelos, la extensión de la frontera agrícola; la asesoría y el acompañamiento a las familias ha sido determinante.
Se desarrollan sistemas y prácticas para controlar la erosión de los suelos, como el cultivo en curva de nivel, las zanjas de infiltración y construcción de terrazas, entre otras, añadió Bendfelth.
Bernardino Bolovito, Presidente del Consejo Comunitario de Desarrollo (COCODE) de San Miguel Chicaj, la ejecución óptima de dichas técnicas ha contribuido a prevenir la erosión, una de las causas del empobrecimiento del suelo y de la pérdida de nutrientes.
Las buenas prácticas agrícolas y más sustentables, han ayudado a elevar la productividad y la rentabilidad de los cultivos, concluyó Bolovito, de la junta directiva del COCODE local.