A pesar de haber salido debilitado de las elecciones legislativas de ayer, el partido de centro será el encargado de formar un nuevo gobierno en Finlandia, para lo cual debe tener en cuenta el fortalecimiento de la derecha y la derrota de su aliado de izquierda.
El primer ministro saliente, el centrista Matti Vanhanen, de 51 años, se reunía hoy con los jefes del Partido de Coalición Nacional, conservador, y el Partido Socialdemócrata (SDP) para tratar de formar una mayoría parlamentaria.
La formación de centro ganó los comicios, pero con sólo un escaño más que los conservadores, que reclaman entrar en el gobierno.
El centro obtuvo el 23,1% de los votos y 51 escaños, seguido por los conservadores, que registraron un 22,3% de los votos y 50 parlamentarios, y los socialdemócratas, con un 21,4% y 45 escaños.
«Las conversarciones serán muy difíciles. Los programas serán determinantes», advirtió ayer Matti Vanhanen. Las tratativas podrían durar varias semanas.
El Centro y los socialdemócratas formaban con el pequeño partido de habla sueca (SFP) la mayoría de centroizquierda en el poder desde 2003.
En teoría, el Centro, los socialdemócratas y el SFP podrían formar gobierno, ya que conservan una mayoría virtual de 110 diputados de un total de 200, pero los observadores estiman esta hipótesis políticamente insostenible.
El mismo Vanhanen ha reconocido que los comicios son «un retroceso para el conjunto del gobierno», dando a entender que aprenderá de lo sucedido.
El SDP, que ha registrado su peor resultado en unas legislativas desde hace 45 años, debería lógicamente pasar a la oposición por primera vez desde 1995.
Mantener la mayoría actual «no reflejaría el cambio habido en estas elecciones», estimaba Bjí¶rn Maansson en el diario suecoparlante Hufvudstadsbladet.
Un cambio de mayoría no tendría un efecto radical en este país, ya que las grandes cuestiones de política interior y exterior son objeto de consenso entre los partidos políticos.
El parlamento finlandés ha aumentado el número de mujeres en la cámara y sigue siendo uno de los que más mujeres tiene en el mundo, con 84 féminas elegidas de un total de 200 escaños, es decir, el 42%.
La cámara saliente estaba compuesta por 75 mujeres y 125 hombres (37,7%).
El país está presidido por una mujer, Tarja Halonen, elegida en 2000 y reelegida en 2006.
Finlandia es el cuarto país nórdico en el que gana la derecha. Los conservadores han ganado recientemente en Dinamarca, Suecia e Islandia. Por el contrario, en Noruega ganaron los laboristas en 2005.