Una catedral gótica y su proceso de construcción sirven de excusa para la articulación de una historia que transcurre en la Edad Media, época de caballeros y escuderos, pero con un contenido sin anacronismos, en el que se entrecruzan sentimientos atemporales, como el odio, el amor, la venganza, o el miedo. El punto de partida es el ahorcamiento de un personaje extravagante, y la maldición que su mujer perpetra a sus acusadores. Por otro lado, Tom, un constructor, y su familia, comienzan un viaje sin retorno por los tortuosos caminos de Inglaterra, tratando de encontrar trabajo. Tom aspira a participar en la construcción de un edificio catedralicio, es su gran sueño. A partir de ahí, se sucederá una cascada de acontecimientos, y nunca mejor dicho. No es un manual de construcción, sino un libro donde las vivencias de los personajes ocupan un primer plano.