Asombroso tesoro de Picasso


Una de las pinturas encontradas, que se han atribuido a Pablo Picasso. FOTO LA HORA: AP SUCCESSION PICASSO

Un electricista francés jubilado y su esposa presentaron 271 obras nunca vistas ni documentadas de Pablo Picasso, con un valor estimado en por lo menos 60 millones de euros (79,35 millones de dólares), dijo el lunes un administrador del patrimonio del artista español.


Dibujo a lápiz sobre un cuaderno. FOTO LA HORA: AP SUCCESSION PICASSOUna guitarra cubista, estilo caracterí­stico de Picasso. FOTO LA HORA: AP SUCCESSION PICASSO

Durante años la pareja mantuvo escondido el asombroso tesoro %u2014que se cree es auténtico, pero cuyo origen aún no está claro%u2014 en su garaje en la Riviera francesa, dijo el abogado de la Administración de Picasso, Jean-Jacques Neuer.

La colección, que data del periodo más creativo del artista, de 1900 a 1932, incluye litografí­as, retratos, acuarelas y bosquejos, además de nueve collages cubistas valorados en 40 millones de dólares, según el diario francés Liberation, que reportó el lunes el descubrimiento.

Pierre Le Guennec, un otrora electricista de 71 años que alguna vez trabajó para Picasso, y su esposa le mostraron al hijo de Picasso, Claude, y otros administradores del patrimonio en Parí­s muchos de los trabajos en septiembre, en busca de un certificado de autenticidad, dijo el abogado.

Poco después de esa reunión, Neuer presentó una demanda a nombre de los herederos de Picasso por presunto recibo ilegal de las obras.

El mes pasado, la policí­a confiscó los trabajos artí­sticos y están hoy bajo custodia de la agencia francesa encargada de combatir el tráfico ilegal de bienes culturales.

Para algunos, el hallazgo de las obras del más renombrado artista del siglo XX es comparable con abrir una cápsula del tiempo o con el reciente descubrimiento y publicación de una autobiografí­a de Mark Twain que estuvo aletargada por 100 años.

«Claude Picasso estaba pasmado. No podí­a creer lo que veí­a», dijo Neuer. «Y prácticamente todos se han sentido del mismo modo … Cuando uno tiene 271 trabajos de Picasso nunca vistos, nunca documentados, es algo simplemente sin precedentes».

Entre las piezas reveladas, creadas después de que Picasso se mudó de Barcelona a Parí­s, se encuentra un bosquejo de su primera esposa, la bailarina rusa Olga Jojlova.

«Es una gran sorpresa, tanto en términos de cantidad como de calidad», dijo Anne Baldassari, presidenta del Museo Picasso en Parí­s. «Estamos conmovidos, sorprendidos, intrigados».

La esposa de Le Guennec, Danielle, dijo por teléfono a The Associated Press que decidieron dar a conocer las obras este año porque estaban envejeciendo y no querí­an «dejar dolores de cabeza» a sus hijos con su propia herencia. Su esposo se sometió a una cirugí­a por cáncer en marzo, dijo.

No pretendí­an verder las obras, afirmó. «Esto fue un regalo», dijo. «No somos ladrones. No hicimos nada malo».

Pierre Le Guennec dijo en entrevista con la cadena de televisión France-2 que las obras se las dio en un baúl la segunda esposa de Picasso, Jacqueline Roque.

«La señora me las dio. Y si ella me las dio, él tuvo que haberlo sabido», dijo Le Guennec. Roque murió en 1986.

«El maestro debió estar enojado. Algo no le gustó, quizá estaba molesto con alguien y dijo: «Ten, dáselo al electricista»»», agregó Le Guennec.

Claude Picasso, citado por Liberation, apuntó que su padre era conocido por su generosidad, pero que siempre dedicaba, fechaba y firmaba sus obsequios, pues sabí­a que algunos de los receptores tratarí­an de venderlos algún dí­a.

«Regalar una cantidad como esta, eso es inaudito. No tiene sentido», dijo Claude Picasso, según Liberation. «Esto era parte de su vida».

«Mi esposo era apreciado por el maestro», dijo Danielle Le Guennec, pero señaló que tení­an «ciertas dificultades» con el hijo de Picasso.

«Nos apuñaló por la espalda, nos llevó a la corte y nos acusó de robo. Tendrá que demostrarlo», dijo.

La cifra exacta de las obras de Picasso es desconocida, dijo Baldassari. Alrededor de 70.000 han sido inventariadas entre sus herederos, pero no incluyen las que vendió él mismo o las que están en museos.