El gobierno peruano adoptará una «posición conservadora» en materia económica en el 2011 debido a los «riesgos externos y la incertidumbre» de los mercados mundiales, dijo ayer el ministro de Economía, Ismael Benavides.
«Las proyecciones macroeconómicas al 2011 no pueden contener factores de optimismo… por un menor crecimiento esperado de las economías avanzadas», dijo Benavides en el Congreso durante la presentación de sus previsiones para el próximo año.
«El Perú, no está aislado de la economía mundial… nuestro país al ser una economía pequeña y abierta integrada al mundo tiene una elevada dependencia de la economía mundial», precisó el ministro.
Benavides indicó que «la crisis fiscal en Europa sigue siendo una de los principales fuentes de riesgo externo».
Según la autoridad, los principales riesgos externos radican en una posible «reversión de los flujos de capitales» ingresados al país y en el probable encarecimiento del crédito externo.
Benavides añadió que podría producirse un aumento de las cotizaciones de las materias primas agrícolas que Perú importa y del petróleo, que son relevantes para establecer los índices de los precios nacionales.
La meta del gobierno para este año es mantener el déficit fiscal en no más del 1,6%, una tasa de crecimiento del consumo de no más de 8%, y un índice de inflación por debajo de 3%.
La economía peruana creció 1,12% el 2009 y el año previo se expandió 9,84%, una de las mayores tasas del mundo.