Camboyanos despavoridos trataban hoy de identificar a sus parientes en morgues improvisadas en Phnom Penh, un día después de la muerte de 378 personas en una gigantesca estampida humana, al culminar un festival tradicional.
Camboyanos despavoridos trataban hoy de identificar a sus parientes en morgues improvisadas en Phnom Penh, un día después de la muerte de 378 personas en una gigantesca estampida humana, al culminar un festival tradicional.