Piden no boicotear seguridad en aeropuertos


John Pistole, de la Administración de Seguridad en el Transporte. FOTO LA HORA: AP Harry Hamburg

Las autoridades estadounidenses trabajarán para hacer que los métodos de revisión de pasajeros sean «lo menos invasivos posible», dijo el titular de la Administración de Seguridad en el Transporte, John Pistole, que pidió a la población no boicotear el sistema.


Ante las protestas de viajeros y la presión de la Casa Blanca sobre las nuevas reglas de revisiones de seguridad, Pistole dijo hoy en varias entrevistas televisivas que entiende las preocupaciones del público. Ayer habí­a asegurado en un comunicado que, como en todos los programas nacionales de seguridad, «hay un continuo proceso de refinamiento y ajuste para asegurar que se apliquen las mejores prácticas».

«Todos quisiéramos vivir en un mundo donde los procedimientos de seguridad en los aeropuertos no fueran necesarios», dijo Pistole, «pero ése no es el caso».

El funcionario dijo que, de todas maneras, los cateos sólo afectaron a una proporción relativamente pequeña de los 34 millones de personas que viajaron desde que las reglas entraron en vigencia.

Los aeropuertos estadounidenses podrí­an sufrir serias demoras durante la transitada época del feriado de Acción de Gracias debido a un boicot que se organiza por internet contra las medidas de seguridad.

En el programa «Today» de la cadena NBC, Pistole llamó el lunes a los pasajeros descontentos con la medida a no «inmovilizar a las personas que sólo quieren ir a casa y ver a sus seres queridos».

La protesta está programada para el miércoles, el dí­a que se considera viajan más personas en Estados Unidos debido a la festividad.

Los participantes en la protesta piden que la gente rechace someterse a sistemas exploradores de cuerpo completo, los cuales examinan a una persona en unos 10 segundos. En lugar de una exploración por escáner, la persona serí­a palpada por un guardia, lo que supone una mayor cantidad de tiempo.

Incluso si tan sólo un pequeño porcentaje de personas acceden a ser inspeccionadas de forma más rigurosa, los expertos avisan que podrí­a haber filas más largas en los aeropuertos, mayores retrasos y más escenas de mal humor.